El presidente interino de la Confederación Brasileña de Fútbol, Ednaldo Rodrigues, aseguró que los cuatro jugadores argentinos estaban autorizados a jugar el partido por las Eliminatorias Sudamericanas y que después iban a ser deportados del país.
El titular de la CBF criticó el accionar de la Anvisa que interrumpió el superclásico a los pocos minutos y calificó como «lamentable» lo que sucedió en el estadio Arena Corinthians.
«Todos se asustaron. Fue un episodio lamentable. El Brasil-Argentina despierta interés en todo el mundo. Según sabemos, la Anvisa hace tres días está acompañando a la selección de Argentina», comenzó Rodrigues en su relato a la transmisión oficial.
«Nos extrañó que lo esperaron a hacerlo después que comenzó el partido. Antes del inicio, el delegado del partido nos dijo que podían jugar, y después iban a ser deportados. Pero después, por un motivo que la CBF no sabe, cambiaron», agregó el presidente interino de la CBF sobre el accionar de la Anvisa.
«Nosotros respetamos siempre los protocolos. En ningún momento quisimos hacer cualquier tipo de subterfugio para no cumplir la legislación», completó Rodrigues.
La propia CBF luego publicó un comunicado en sus redes sociales en el que ratifica la «sorpresa» que les generó el accionar de la autoridad sanitaria de Brasil.
A continuación el texto completo de la CBF:
«La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) lamenta profundamente los hechos ocurridos que provocaron la suspensión del partido entre Brasil y Argentina por las Eliminatorias Sudamericanas para el Mundial de Qatar 2022.
La CBF defiende la implementación de los más rigurosos protocolos sanitarios y los cumple en su integridad.
Por lo tanto, resaltamos que nos quedamos absolutamente sorprendidos en el momento con el accionar de la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria, con el partido iniciado, teniendo en cuenta que pudo haber actuado mucho antes en varios momentos y en días anteriores al partido.
La CBF destaca que en ningún momento, por medios del presidente interino, Ednaldo Rodrigues, o de sus dirigentes, interfirió en ningún punto relativo al protocolo sanitario establecido por las autoridades brasileños para la entrada de personas al país. El papel de la CBF fue siempre para intentar promover un acuerdo entre las entidades envueltas para los protocolos sanitarios pueden ser cumplidos y el que partido pueda realizarse.
La CBF reitera su decepción con los acontecimientos y aguarda la decisión de la Conmebol y de la FIFA en relación al partido».