“No queremos una convocatoria masiva. Queremos que la gente que pase por la plaza San Martín, el transeúnte, se informe, se entere de la importancia que tiene el Humedal para nuestra salud, para la de nuestros hijos, para la de todos”, explica Julia.
Ella forma parte de la Multisectorial por los Humedales, acaso la organización que batió todos los récords del mundo en plagarse de miembros, en especial voluntarios, en el menor tiempo posible, incluso medible en horas. Y como parte de la comisión de prensa difunde y explica el por qué de la nueva convocatoria, que tendrá lugar frente a la sede de Gobernación este viernes a partir de las 10 con una radio abierta, charlas y música, “pero con todos los cuidados que impone la pandemia, con uso de barbijo en todo momento y manteniendo siempre la distancia social”.
“Jornada por los humedales para exigir el fin de los incendios, el plan de contingencia y la sanción inmediata de ley de Humedales”, es el título que lleva el nuevo despliegue de la organización, que brotó prácticamente de un día para el otro en medio de los peores y más destructivos incendios que se desataron en las islas del Paraná.
En el peor momento de los fuegos y ante “la inacción del Estado”, decenas de voluntarios hicieron del enojo y la impotencia una acción directa y fueron ellos mismos a enfrentar a las llamas cuerpo a cuerpo, trabajo que además complementaron con una colecta de donaciones para los isleños que habían perdidos sus microcultivos, sus canchas de pesca, y en varios casos sus propios hogares, consumidos por el fuego o aplastados por las cenizas que dejaba.
La joven explica a El Ciudadano que la situación menguó con el despliegue de los brigadistas y –más todavía– con las lluvias, pero advirtió: “Paró de llover, pasó un día de sol, y al otro día empezó el humo de nuevo”. Ante la situación, una de las asambleas de la Multisectorial, que reunió nada menos que a 84 personas en una pantalla virtual, resolvió avanzar en una nueva acción, esta vez la jornada frente a Gobernación: “Porque apuntamos ahí, a la provincia”.
La convocatoria está pensada con largo aliento, más de siete horas, para evitar aglomeraciones, por la situación de la pandemia en Rosario y la región. Pero no la postergaron por ese motivo ante la evidencia, ya incontrastable, de que los fuegos no son “por un cigarrillo mal apagado, o por un descuido en un asado”.
Más aún la voluntaria recordó que la Municipalidad de Victoria emitió una ordenanza para impedir el cruce a las islas para preservar a los residentes de contagios de coronavirus, a la par que restringió la circulación en su jurisdicción por el mismo motivo. “¿Y cómo es que se prendió fuego otra vez? ¿No se aplica a la gente que lo prendió?”.
Julia traza un razonamiento incontrastable: los nuevos focos aparecieron a poco más de 24 horas de que se disipara la tormenta que los apagó: “Y en un día no se llega a secar la zona”. La conclusión es obvia: “Son intencionales”.
Frente a ello, la jornada se propone para “exigir a las autoridades”, una serie de acciones en sus manos:
- Sanción de la ley de Humedales YA!
- Cese efectivo y real de las quemas.
- Aplicación inmediata del Piecas (Plan Integral Estratégico para la Conservación y el Aprovechamiento Sostenible de la región Delta del Paraná) y del Plan de Contingencia de protección de los humedales.
Y finalmente también incluyeron el “no” al acuerdo de producción porcina con China, al que ven como una extensión del mismo modelo productivo que está haciendo añicos el Humedal.
A la calle
Desde su formación, la Multisectorial lanzó una rápida serie de acciones en escalada y que tuvieron su fase más arriesgada en la convocatoria a voluntarios para acudir con las herramientas que fuera a trazar cortafuegos en la Boca de la Milonga, donde las llamas dejaron sin casa a históricos pobladores que nunca habían sufrido nada semejante.
El trabajo, que llevó a abrir una convocatoria a voluntarios que horas después debieron cerrar por el aluvión que respondió y la convirtieron en un formulario más ordenado –hoy también cerrado– se convirtió inmediatamente en integral: dueños de lanchas y botes pusieron sus embarcaciones a disposición, personal entrenado se puso en contacto con la Multisectorial para dar una serie de recomendaciones y prevenciones, las donaciones se multiplicaron. Julia cuenta que están tratando de ordenar una base de datos de 900 personas que en sólo tres días se sumaron, expresando su voluntad de ir de inmediato a enfrentar el fuego.
Pero intenta dar una cuota de calma: “Si el Estado está ausente vamos a volver a ir; pero no es tarea nuestra como ciudadanos ir a apagar el fuego”, resume. Aunque también recuerda que “el estado estuvo ausente seis meses”, en los que las islas se fueron devastando de manera exponencial, después de lo que hasta el propio intendente de Victoria, Domingo Maiocco, quien además es productor rural, describiera antes del desmadre como una “práctica tradicional” de quemas controladas para “renovación de pastizales”.
Lejos de esa consideración, otros dirigentes, como la concejala rosarina Norma López y hasta el ministro de Ambiente nacional, Juan Cabandié, describieron como una “pamperización” lo que estaba ocurriendo: una devastación total de las selvas de galería y la vegetación autóctona del Alto Delta para convertirlas en campos ganaderos, aprovechando la extensión de suelo por la sequía y la bajante histórica del Paraná.
“Esta situación se viene dando desde hace muchos años, pero con más furia desde el mes de febrero del año vigente. Luego de cortar varias veces el puente Rosario-Victoria, de marchar hasta el peaje del mismo puente, de
unir con embarcaciones a remo las dos orillas del Paraná y de marchar a través del centro de la ciudad de Rosario, la Multisectorial por los Humedales organiza una jornada de lucha por los humedales y contra el ecocidio”, marca un párrafo de la convocatoria para este viernes.
Con todo, los organizadores piensan la jornada como un acto itinerante, en el que tratarán en todo momento de evitar una aglomeración. Y, si se produce, marcar desde el escenario que se montará, en todo momento, el mantenimiento de la distancia social.
Las actividades, según la agenda, comenzarán a partir de las 11 y hasta las 18.30, también con “intervenciones artísticas, intercambios formativos y presentación del petitorio”, con los reclamos ya mencionados, dirigido a los tres niveles del Estado, pero especialmente a la provincia. Tras el primer tercio de la jornada, a las 12.30, integrantes de la Multisectorial darán una conferencia de prensa para explicar qué se viene haciendo y qué se hará: si bien su mayor expectativa es no tener de nuevo que movilizarse para contener incendios, a mediano plazo piensan en una campaña de reforestación de lo que quedó devastado, pero ya no solos.
Además se están contactando con muchas otras organizaciones que enfrentan problemáticas similares o análogas en otra regiones del país. Y en lo inmediato la tarea central que se plantean es difundir información. “Y para ello pensamos en eventos culturales o artísticos, para llegar a la sensibilidad. Nos interesa que el ciudadano común se entere de la importancia de lo que está sucediendo. Hay muy poca gente que está informada de lo importante que es el Humedal. Y si los humedales se transforman en un lugar de producción dura, va a impactar en la salud nuestra y la de nuestros hijos. Porque las cosas se van a para afuera y acá nos queda la podredumbre y la miseria”, cierra Julia.