Dentro de los controles que las direcciones de control del municipio realizan durante el fin de semana, sobresalieron dos conductores de taxis, a quienes les retiraron los rodados tras controles de alcoholemia positivos.
El primer caso se dio en la madrugada del sábado, cuando agentes de la Policía de Seguridad Vial detuvieron a un taxi de Rosario en la vecina ciudad de Pérez. Según voceros de la Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana, el conductor de un Chevrolet Classic, patente terminada en 705 y RA terminado en 88, “se vio obligado a detenerse y al soplar el alcoholímetro marcó 0.82 g/l. Pero además, el conductor tampoco contaba con licencia de conducir, por lo que se produjo la remisión del auto al corralón municipal”, señalaron.
En tanto, en la madrugada del se recibió una denuncia de un taxista alcoholizado al 147. Luego de realizarse el seguimiento por GPS, se identificó el Renault Logan patente finalizada en 589 y RA terminado en 90 que estaba parado en una estación se servicio ubicada en avenida Pellegrini al 1700.
En dicho lugar, se le realizó al conductor el test de alcohol, que dio como resultado 1,94 gramos de alcohol en sangre, el registro más alto del primer fin de semana del año, contabilizando todos los controles que se dieron en la ciudad. El taxi fue remitido al corralón y al titular del taxi, quien era el que conducía, se le retuvo la licencia.
Vale aclarar que si bien el límite de alcohol en sangre para los conductores de autos es 0.5 g/l, para los servicios públicos es 0. En todo 2014 se detectaron 7 casos de alcoholemia positiva en taxistas, resaltaron desde el organismo municipal.