Ni bien se acomodó en el hotel Radisson Blu de Belo Horizonte a la espera del duelo ante el local por las semifinales, la selección se encontró con una sorpresa: oficiales de la Conmebol se apersonaron para practicarle a los 23 futbolistas que integran el plantel un control antidoping, el segundo que le hacen desde la previa de la competencia.
El primero se dio el 3 de junio en el complejo de Ezeiza, hecho que obligó a modificar la rutina de entonces. Por ese test pasaron los 12 equipos participantes de la competencia. Y esta vez también les tocó a los otros tres protagonistas que quedan en el torneo: el anfitrión, Chile y Perú.
Durante su primera semana en Brasil, Argentina había enfrentado una situación confusa respecto a un supuesto control. Fue en Salvador de Bahía, cuando personal de Conmebol también se presentó en la concentración albiceleste para realizar un control antidoping sorpresa para todos los jugadores, hecho que luego fue desmentido por AFA.
“Este control es de rutina y se hace en semifinales (última instancia de control) para los equipos involucrados”, confirmaron una vez que se hiciera pública la noticia desde el departamento de comunicación de la selección.
El combinado nacional se entrenará este lunes en el predio de Cruzeiro y por la tarde el entrenador Lionel Scaloni brindará la habitual conferencia de prensa previa a cada examen. Argentina ya pasó por Belo Horizonte durante esta Copa América: en el Mineirao, sede este martes del gran superclásico sudamericano, igualó 1-1 ante Paraguay por la segunda fecha del Grupo B.
