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Cooperativa Oktupak: “Proyectamos el futuro de los hijos de nuestros socios que están presos»

Trabajan para que los detenidos, a través de la cultura del trabajo, puedan mejorar el vínculo con sus hijos y transiten un camino con oportunidades en la sociedad

Por: Jesús Cabral- Tiempo Argentino

La Cooperativa Oktupak tiene dos ejes productivos, un taller dentro de la Unidad Penal Número 15 de Batán, en General Pueyrredón, y un equipo de tareas en construcción, jardinería y medio ambiente afuera de esta cárcel dependiente del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB).

El trabajo que realizan permite no solo educar en lo laboral a los asociados, “también refuerza la filosofía de la organización del pasivo al activo», explicó a Tiempo Juan Manuel Aiello, presidente de la cooperativa.
Creación y reglas en el pabellón

Todo comenzó en 2009, cuando el juez de la Cámara de Apelaciones y Garantías en lo Penal de Mar del Plata, Esteban Viñas, “introdujo el rugby en los penales como herramienta educativa”, recordó Juan, de 52 años. Esta experiencia y práctica deportiva “fue creciendo y tomando forma hasta que se logró constituir un pabellón, un espacio para todos los detenidos que tuvieran ganas de ser parte del proyecto”, agregó.

Pusieron un requisito a los habitantes del pabellón, que terminen sus estudios: “El que no sabía leer aprendió, quien no tenía terminada la educación primaria la terminó, así también sucedió con la educación secundaria que algunos siguen cursando para cumplir con la regla que instalamos”.

También es obligatorio la participación “en talleres de oficios, estudios terciarios, y todo tipo de formación educativa que les permitiera a los detenidos mejorar sus capacidad intelectual y herramientas de conocimiento”, enfatizó Aiello.
Incentivar a los detenidos

De este modo fue mejorando paulatinamente la vida cotidiana “de las personas en situación de encierro en términos de posibilidades de distintas actividades y oficios”, contó Juan. Entre otras cosas se especializaron en la reparación de sillas de ruedas, en 2018 recibieron 160 sillas de ruedas rotas del Programa de Atención Médica Integral (PAMI) “de las cuales recuperamos más de 50, esto fue lo que nos impulsó hacia la autogestión, porque se hizo un hermoso trabajo colectivo”.

Pero faltó la parte más importante, “porque el Pami no nos dio un reconocimiento económico y lo real es que para lograr que una persona adhiera o abrace la cultura del trabajo tiene que tener una compensación”, remarcó el presidente cooperativista.

Al ver que eso no sucedió “como lo esperábamos, surgió la idea de constituir una cooperativa, para que administrativa y legalmente podamos ser una empresa, facturar y cobrar el trabajo como corresponde para dignificar nuestras vidas con el ingreso económico como corresponde según la organización social del trabajo”, aseveró.

La conformación de Oktupak

Cuando empezó la pandemia, en 2020, empezaron a realizar los trámites para formalizar, se inscribieron en el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (Inaes). Finalmente, en 2022, “logramos firmar un convenio con el entonces ministro de Justicia de Derechos Humanos de la Provincia de Buenos Aires, Julio Alak”, recordó el presidente.

Les dio en comodato un espacio dentro de la cárcel de Batán “donde nosotros logramos constituir intramuros un taller de herrería y carpintería, entonces refaccionamos el lugar y permanecemos allí en la actualidad, así pudimos hacer nuestro trabajo y empezamos a visibilizarlo”, reconstruyó el hombre.

Empezaron a trabajar con todos los materiales en desuso que consiguieron, “un balneario de la zona que se llama ‘Luna Roja’ había logrado una nueva habilitación en ese momento, nos donó 70 reposeras de caños galvanizados y viejos camastros de madera, esto nos permitió capacitarnos, mejorar, aprender y conocernos entre nosotros”, recordó el presidente.

La Cooperativa Oktupak está formada por “una plantilla de ocho detenidos fijos y cuatro que vienen en virtud de las necesidades que tengamos en el taller, por si necesitamos sacar trabajo rápido”, explicó Juan. En el inicio no tenían herramientas, “nuestros amigos no fueron regalando algunas y otras compramos con los recursos que generamos con la venta de las cosas que fabricamos”, valoró en relación al trabajo que hacen, sostienen en el tiempo y genera valor.

Con la ayuda del gobernador bonaerense

Hasta que finalmente en 2023: “Recibimos un subsidio de la provincia de Buenos Aires, del gobernador Axel Kicillof, que nos permitió comprar máquinas, vestimenta adecuada para las tareas que realizamos y elementos de seguridad para el taller”, agradeció el hombre.

Lo hicieron todo durante la pandemia, “regularizamos la cooperativa formal y administrativamente”, exaltó. Realizaron trabajos “para el municipio, privados, clubes, ONG y construimos muchos muebles que hoy están a la venta en una exposición”, señaló.

Ante el contexto económico y político actual pretender seguir luchando “para mejorar nuestras prestaciones junto al país entero, que hoy atraviesa una terrible crisis, para que podamos salir adelante todos juntos”, alentó el presidente.

“Nuestra cooperativa tiene una pata puesta en la Unidad 15 de Batán y la otra extramuros para aquellas personas que salen en libertad y que son parte de nuestra organización tengan una contención laboral”, explicó Juan, para la integración post carcelaria. Continuó relatando “tenemos la rama de construcción y jardinería, con estos dos oficios nos estamos insertando en la cultura del trabajo en la comunidad”.

En total, la plantilla de la cooperativa está compuesta “por 30 familias entre los trabajadores detenidos, liberados, otras personas ajenas al mundo del delito que están capacitadas y que también son parte de nuestra organización”, detalló.

Con el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación “hemos logrado conseguir una asistencia alimentaria para las familias, esto es muy significativo, porque gracias al trabajo que hacen los detenidos sus parientes reciben algo”, enfatizó el hombre. “Lo cual para nosotros es muy importante, porque sabemos que la cooperativa puede tener un efecto inmediato sobre aquel trabajador que se incorpora a este colectivo”, aseguró.

Salvar a las infancias

Lo que más los motiva y lleva a no claudicar en esta lucha:”Es el futuro de los hijos de los socios que estás detenidos y los liberados, porque nadie tiene mejor ejemplo que el del hogar, los niños y niñas que ven a sus padres trabajar tienen más chances de seguir ese camino y no el que les tocó transitar a sus padres”, ahondó el presidente.

En la actualidad están en contacto con algunas fábricas del Parque Industrial “para poner a disposición el taller de herrería y carpintería que está en la cárcel y el que está ubicado a dos kilómetros para los liberados, para poder capacitarnos en las labores que ellos tengan mayor demanda”, explicó el hombre.

Recordó que en 2021 los visitó la periodista Ana Sicilia, “quien arma bibliotecas continuamente en las cárceles y este jueves vino nuevamente a vernos”. La primera vez le regalaron una muñeca metálica “que lleva libros en una mano y, en la otra, un corazón”, dijo.

También explicó que “el significado simbólico que nosotros le dimos a esa obra, es que la compañera nos trae libros y amor, son dos componentes que para las personas en situación de encierro son muy valiosos e importantes”, enfatizó.

Feria navideña

Con motivos de la víspera navideña, la cooperativa realizó una feria, en la que expusieron muebles y varios artículos que fabricaron, como ser, sillas, sillones, mesas, bancos, taburetes, juguetes de madera, tablas de cocina, bañeras transformadas en coloridos asientos individuales y de tres cuerpos.

Este encuentro con la gente permitió poner de manifiesto la capacidad laboral de los socios de la cooperativa, la manualidad, el conocimiento en herrería y carpintería. Los objetos han sido -en su totalidad- construidos con materiales de descarte, recortes de madera, hierros viejos y donaciones de materiales en desuso.

“Para nosotros ese día estuvo lleno de satisfacciones, porque pudimos mostrar lo que venimos haciendo y la gente aceptó con conformidad nuestra labor, eso es muy importante, porque nos dio ánimo y fuerza para seguir construyendo”, valoró Juan. Finalizó expresando que “soñamos con seguir creciendo, estamos convencidos -conceptual y políticamente- que más trabajo es menos reincidencia en el delito, esto sin dudas nos favorece a todos crear un mundo menos conflictivo”.

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