Argentina quedó igualada con Israel 1-1 en el repechaje para jugar en el Grupo Mundial 2015 de la Copa Davis, luego de haberse jugado hoy los dos primeros puntos de la serie, que comenzó bien con el triunfo de Leonardo Mayer sobre Bar Botzer, y se complicó luego con la derrota de Carlos Berlocq ante Dudi Sela.
Mayer, nacido en Corrientes y ubicado en el puesto 25 del ranking mundial de la ATP, encendió la ilusión albiceleste en el Sunrise Tennis Club con su victoria sobre el debutante Botzer (776) por 6-4, 3-6, 6-2 y 6-1 en dos horas y 26 minutos, antes unos escasos 1.000 espectadores, 300 de ellos argentinos.
Sin embargo, Israel se hizo fuerte e igualó la eliminatoria con el triunfo de Sela (84) sobre ‘Charly’ Berlocq (67) por 6-3, 6-7 (5/7), 6-2 y 6-2, luego de un extenuante partido que duró tres horas y 20 minutos, aunque pareció más largo porque estuvo interrumpido casi dos horas por lluvia, cuando apenas se habían jugado tres puntos.
Argentina, que quedó en situación de revalidar su plaza entre los mejores del mundo, los que integran el Grupo Mundial, tras haber perdido en febrero pasado como local ante Italia por 3-1, en Mar del Plata, se jugará una carta importante mañana desde las 11.30 en el partido de dobles.
El marplatense Horacio Zeballos y el azuleño Federico Delbonis jugarán ante los especialistas israelíes Jonathan Erlich y Andy Ram, campeones del Abierto de Australia en 2008, pero en el tramo final de sus respectivas carreras.
El domingo desde las 12.30 se jugarán los dos últimos puntos, primero `Leo` Mayer ante Sela, y luego Berlocq frente al inexperto Botzer.
Argentina comenzó con el pie derecho con el triunfo de Mayer, quien dejó atrás ciertas vacilaciones que le costaron ceder un set e impuso su mayor jerarquía ante Botzer.
El correntino comenzó el partido con un quiebre sobre el servicio del inexperto israelí y luego controló el set inicial sin problemas, sustentado en la potencia de su derecha y los errores no forzados de su rival, que le permitieron mantener el control y llevarse el parcial por 6-4 en apenas 41 minutos.
En el segundo, el ‘Yacaré’ mantuvo la iniciativa y se puso 3-2 arriba con otro quiebre sobre el servicio del Botzer, pero luego llegó lo impensado, ya que se dejó consumir por los nervios y le cedió el dominio a su rival.
Botzer ganó cuatro juegos seguidos y pasó de 2-3 abajo a 6-3 arriba con algunos argumentos interesantes como la devolución del servicio (aunque es cierto que Mayer incurrió en varias dobles faltas) y un revés que lastimó, tanto paralelo como cruzado.
Los hinchas argentinos, conscientes de que el correntino deambulaba por la cancha y mostraba gestos de confusión, alentaron sin parar en ese momento.
Mayer, aturdido, repetía gestos de confusión, como secarse una y otra vez la transpiración con la toalla, como ganando tiempo para pensar.
Ni bien finalizado ese set, el argentino solicitó ir al baño y ahí recibió el consejo sabio del subcapitán Mariano Zabaleta, quien le repitió una y otra vez «tranquilo Leo, el partido es tuyo pero tenés que calmarte y controlar la ansiedad».
El correntino se calmó y en el inicio del tercer set fue una tromba con la velocidad y potencia de su derecha, sumada a devoluciones precisas, así se puso 5-0 rápido con dos quiebres sobre el servicio del israelí, primero para 2-0 y luego para 4-0, lo que levantó al público argentino y a su vez trasladó la preocupación al banco visitante.
Mayer vaciló al momento de cerrar pero igual se llevó el tercer set por 6-2 con otro quiebre de servicio y dejó el partido a su merced, bajo control.
El argentino volvió a golpear de entrada en el cuarto set y se puso 3-0 con dos juegos de saque perfectos y un quiebre, ante un rival que se desmoronó por completo y claudicó ante la diferencia de calidad, que en el tenis se traduce en la velocidad de la pelota, donde hubo una diferencia abismal.
El correntino estiró la ventaja a 5-0 y luego definió por 6-1 ante el desconsuelo de Botzer y la algarabía del capitán Martín Jaite, quien se despedirá del cargo ni bien finalice la serie y desea hacerlo con Argentina en primera división.
Mayer celebró con el puño apretado, corrió y abrazó al banco de suplentes, en especial al ‘Negro’ Zabaleta, quien lo supo aconsejar en su momento más difícil dentro de un partido que no fue tal, ya que siempre mostró una jerarquía superior y eso fue lo que al final le reportó el triunfo.
Luego entró en acción Berlocq, quien pretendió tomarse revancha de la derrota que Sela le propinó hace 15 días en el US Open por 1-6, 6-3, 6-2 y 7-5 en la ronda inicial, pero no pudo y cayó ante un rival que fue superior.
En el primer set, ‘Charly’ no tuvo peso con su pelota y cada vez que arriesgó falló, o bien encontró buenas respuestas del otro lado, y así perdió por 6-3 tras ceder su servicio en el sexto game, lo que permitió a su rival adelantarse 4-2 y luego definir.
El argentino se mantuvo errático y quedó abajo 3-0 en el segundo parcial luego de ceder su servicio dos veces, pero luego de ese momento desfavorable reaccionó y mostró su mejor versión.
El ‘Gladiador’ fue puro coraje y también usó la inteligencia para abrir a Sela por el lado del revés para después definir sobre la derecha o directamente forzar el error, y así remontó, igualó, forzó un tie break y también se lo llevó por 7-5 para dejar el partido empatado.
En el tercer set, ambos cometieron errores, pero el israelí dio siempre la sensación de tener la situación bajo control y, con un revés solido y precisión en los saques, se llevó el set por 6-2 tres quebrar al argentino tres veces.
Sela mantuvo el control en el cuarto parcial y quebró dos veces más a Berlocq (3-1 y 4-2) y ganó cómodo por 6-2, lo que permitió a su país igualar la eliminatoria.
Pese a la derrota, que era previsible, Argentina sigue con chances en la serie, ya que edificó su táctica en torno a Mayer, quien debería ganarle el domingo a Sela, y después queda el partido de Berlocq ante Botzer, sin descartar un posible triunfo de dobles mañana, aunque ese punto también es «perdible».
