La décima jornada del juicio que se sigue a los represores Jorge Rafael Videla y Luciano Benjamín Menéndez se inició hoy con el testimonio del ex preso político Fermín Rivera.
En esta quinta semana del debate oral y público, que se desarrolla en los Tribunales Federales, Rivera ofreció más detalles sobre lo que vivió mientras estuvo detenido en la Unidad Penitenciaria San Martín (UP1).
Uno de los casos que se juzga en este proceso tiene que ver con el fusilamiento de 31 presos políticos alojados en esa cárcel, fraguando situaciones de fuga.
Rivera había comenzado su testimonio el jueves último y debido a lo extenso de la jornada, el tribunal de enjuiciamiento resolvió pasar a cuarto intermedio hasta hoy.
El testigo ya había reconocido a dos imputados, el cabo Miguel Angel Pérez y al oficial Enrique Pedro Mones Ruiz, como los autores materiales del asesinato del preso político Raúl «Paco» Bauducco en el patio de la Unidad Penitenciaria número 1 (UP1), el 5 de julio de 1976.
También identificó al militar Gustavo Adolfo Alsina, como el que dio la órden de estaquear una noche fría del 14 de julio de 1976, en el patio del pabellón 14 de mujeres, a José «Cacho» Moukarzel hasta que muriera, sin brindarle atención médica.
En la jornada de hoy Rivera detalló que como consecuencia de las «terribles torturas” recibidas durante su detención en la UP1 hoy padece las «irrecuperables secuelas físicas y psíquicas”.
«Hoy tengo ligamentos rotos, no tengo estabilidad y me cuesta mantenerme en pie”, relató Rivera y precisó que está en tratamiento para mejorar la movilidad de sus rodillas.
«Me cuesta muchísimo recuperar la alegría por los momentos difíciles que me tocó vivir”, manifestó, y recordó que a los presos los golpeaban, maltrataban y torturaban varias veces por día, en especial las guardias que estaban a cargo de Alsina.
Las partes continuaban con el interrogatorio a Rivera y se espera para esta jornada la exposición de al menos otros dos testigos.
En esta causa, junto a Videla y Menéndez, están imputados otros 29 represores sindicados con distintas responsabilidades en el asesinato de los 29 presos políticos fraguando situaciones de fuga.
También se debate en este juicio la causa Gontero o Menéndez por el secuestro y tortura de ex miembros del Departamento de Informaciones Policiales (D2), que tiene como principal imputado a Menéndez.