Una joven denunció al entrenador de Primera División del fútbol femenino del Club Atlético Camioneros Córdoba por presunto abuso sexual, por hechos que habrían ocurrido durante cuatro años. Tras la denuncia, el club dejó libre a la jugadora mientras el acusado sigue en la institución al frente del plantel, según informó el portal Actualidad.
La denunciante hace poco cumplió los 18 años, pero los abusos del entrenador habrían comenzado cuando ella llegó al club a los 13. Al principio le pedía fotos “para ver cómo estaba de cuerpo”, luego llegaron las insinuaciones durante los entrenamientos y, posteriormente, el contacto físico.
Según consta en la denuncia, en dos oportunidades el hombre obligó a la adolescente a practicarle sexo oral. “Me dijo en una ocasión que, si no lo hacía, no iba a jugar nunca”, relató la víctima al portal Perfil Córdoba.
La chica contó que el entrenador la “basureaba y humillaba adelante de todos”, tanto en los partidos como en las prácticas: “Yo no decía nada por miedo a no jugar nunca más”. Presuntamente, el hombre aprovechaba su condición de poder para someter a la adolescente.
Luego de cuatro años en los que ocurrieron al menos cuatro hechos que se detallan en la denuncia, la adolescente (por entonces de 17 años) decidió contarle a su mamá el tormento que padeció.
El 23 de julio de este año formalizaron la acusación en la Unidad Judicial de Violencia de Género Familiar y Sexual y, dos días después, se reunieron con el presidente y el coordinador del fútbol femenino del club Camioneros para pedir explicaciones y exigir medidas.
Según contó la madre de la víctima a este medio, las autoridades del club le prometieron que “iban a sacar al entrenador” y le preguntaron a su hija si quería seguir en la institución. “Ella les dijo que sí, siempre y cuando no esté el abusador, pero el coordinador le dijo que no podían asegurarle eso”, dijo la mujer.
Luego de esa respuesta, la chica pidió el pase y el club, inmediatamente, accedió a otorgárselo de manera definitiva, renunciando a toda compensación económica. Jorge Farías, secretario de la institución deportiva, confirmó a Perfil Córdoba que la jugadora solicitó el pase y Camioneros se lo otorgó.
“Tuvimos conocimiento de la denuncia porque nos llegó la notificación judicial pidiendo información sobre el entrenador. La madre y la chica nos comentaron de algo, pero no de la manera que denunciaron. Por lo tanto, tomaremos una resolución cuando la Justicia determine si es culpable”, manifestó Farías.
La madre de la denunciante elevó un reclamo a la Liga Cordobesa de Fútbol y le respondieron que no podían hacer nada porque los clubes son entes autárquicos y que, en tal sentido, toman sus propias decisiones ante estas denuncias, relató.
La víctima asegura que más chicas del club padecieron situaciones similares a las ella sufrió, pero que no se animan a hablar por temor a represalias.
El caso está siendo investigado por la fiscal de Delitos contra la Integridad Sexual de Segundo Turno, Ingrid Vago. Mientras tanto, el Juzgado de Niñez, Adolescencia, Violencia Familiar y de Género de 1ra Nominación Secretaría 2 dispuso una orden de restricción que prohíbe al denunciado tener algún tipo de acercamiento a la joven.
Tras la denuncia y el pase otorgado, la joven no volvió a jugar de manera federada. Participó de algunos entrenamientos en otro club, pero no sabe cómo continuará con la práctica del deporte.
“Hasta el día de hoy que no puedo jugar me siento culpable y frustrada. Me pregunto si la denuncia que hice estuvo bien o debería haberme quedado callada como hice durante años para poder seguir jugando”, dijo.