Las provincias argentinas cerrarán sus cuentas este año con un déficit fiscal de 9 mil millones de pesos y podrían duplicar ese rojo en 2012, porque desde enero comenzarán a pagar sus abultadas deudas con la Nación.
En ese marco, al menos seis de las 16 provincias que se inscribieron en el plan de desendeudamiento ya le pidieron a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner que prorrogue por un año el período de gracia que prevé el Programa Federal de Desendeudamiento (PFD).
Senadores nacionales encabezados por el rionegrino Pablo Verani preparan un proyecto de ley para prorrogar el inicio de los pagos y esperan aprobarlo antes de diciembre, lo cual también dependerá del oficialismo y la venia presidencial.
Según fuentes de la Rosada consultadas por NA, la presidenta tiene en carpeta el regreso del Programa de Asistencia Financiera (PAF), aplicado entre 2005 y 2009, criticado por discrecional por gobernadores como Juan Schiaretti.
El Presupuesto 2012 destinará 6.984 millones de pesos en asistencia a las jurisdicciones con inconvenientes para afrontar las cuotas del PFD y también volverá a atenuar las restricciones sobre el comportamiento fiscal por las consecuencias que aún persisten de la crisis financiera internacional de 2008 en la estructura del gasto.
Es que los gobernadores deberán enfrentar las demandas salariales y los vencimientos de deuda con menos capacidad financiera, por la ralentización de la recaudación y la reducción del fondo sojero por la caída de los precios.
El PFD prevé el pago de unos 68.353 millones de pesos en 227 cuotas mensuales (hasta 2030) con una tasa anual del 6 por ciento y dispone como garantía la coparticipación.
Sólo en 2012 las provincias deben pagar unos 7.293 millones de pesos (1.700 millones de dólares) de deudas contraídas con organismos internacionales y otros 3.115 millones de pesos del pasivo con la Nación, lo que se sumará al rojo de 11 mil millones por el aumento del gasto público.
El Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf) pronosticó que, si el gasto crece al 35 por ciento hasta fin de año, las gobernaciones podrían registrar un déficit fiscal total de 13.444 millones de pesos.
La mayoría de las provincias revirtió en 2010 el déficit registrado en 2009, a partir de adelantos del Tesoro Nacional, y terminó con un superávit de 5.487 millones de pesos, aunque Buenos Aires, Mendoza, Santa Cruz y Santa Fe conservaron el rojo.
Aún resta poco más de dos meses para finalizar 2011 y el rojo a la vista ya toca los 8.450 millones con una proyección de 9 mil tras el desembolso de los sueldos públicos de este mes, noviembre y diciembre.
Guillermo Giussi, experto en gestión fiscal de la consultora Economía & Regiones, precisó que el déficit crecerá un 125 por ciento respecto de 2010, para ubicarse muy cerca del registrado en 2009, cuando había alcanzado los 10 mil millones de pesos.
Se ve un retroceso en comparación con 2010. El gasto pasó del 26 al 30 por ciento anual y los recursos bajan del 31 al 28. Eso determina un reacomodamiento fiscal que terminará por cerrar con un rojo de 9 mil millones este año, dijo Giussi a NA.
Un análisis de la consultora Abeceb.com indica que la toma de fondos en los mercados externos se perfila cada vez más como la opción infranqueable que otorgaría a las provincias un respiro ante la situación de sus finanzas. La cuestión salarial es clave e incluso es la que determina si el año será bueno o malo, dado que por cada dos pesos en caja uno va a parar a salarios, mientras que la Nación destina sólo el 15 por ciento de sus recursos a sueldos.
El propio ministro de Economía de Santa Fe, Ángel Sciara, admitió que el déficit de la provincia será de entre 1.100 y 1.200 millones de pesos este año por las subas salariales no presupuestadas.
En Mendoza, la oposición le pide a Celso Jaque que blanquee el déficit de mil millones que le dejará a su sucesor, pero el Ejecutivo descartó hablar del tema.
Tierra del Fuego prevé un déficit financiero de 550 millones para 2012 mientras que provincias como Chaco, San Luis, San Juan, Santiago del Estero y Capital Federal (con la emisión de un bono Tango de por medio) prevén terminar el año próximo con las cuentas equilibradas.
Buenos Aires, Corrientes, Formosa, Jujuy, Córdoba, Río Negro, La Pampa y Santa Cruz aún no presentaron sus proyectos de presupuesto, pero las estimaciones privadas indican que volverían a soportar rojos.