Los 19 agentes involucrados en la causa que investiga la muerte de Emanuel Campos y David Medina, los jóvenes ejecutados por balas policiales a Arijón y Callao luego de una persecución, fueron pasados a disponibilidad, una decisión administrativa que confirmaron voceros del Ministerio de Seguridad. A su vez, continúan en prisión preventiva, cuyo plazo fue extendido por la Justicia hasta el próximo 12 de diciembre, a la espera del juicio en que se ventilarán las responsabilidades de cada uno en el fusilamiento de las víctimas el 23 de junio pasado.
Por el pase a disponibilidad, el destino de los uniformados dentro de la fuerza estará sujeto a qué deciden las autoridades del Ministerio de Seguridad en el marco de los sumarios administrativos, en los que se determinará las sanciones que corresponden, incluido el apartamiento de la fuerza.
La causa que investiga el fusilamiento policial de David Campos y Emanuel Medina tiene dos policías acusados por homicidio. Uno es el agente de la Policía de Acción Táctica (PAT) Leonel Emiliano M., imputado como autor del disparo fatal que recibió David y también acusado por abuso de función pública. Otro es Luciano B., que revista en el Comando Radioeléctrico y fue sindicado por testigos como quien abrió fuego contra los jóvenes el 23 de junio pasado luego de que se produjera una extensa persecución policial que terminó cuando el Volkswagen Up en el que iban las víctimas chocó contra un árbol en Callao al 5700.
Los restantes 17 policías están acusados de encubrimiento doblemente agravado y falsedad ideológica de documento público.
