El principal sospechoso del crimen del niño Gastón Bustamante en Miramar será indagado hoy por el fiscal que investiga el hecho, Rodolfo Moure, informaron fuentes judiciales.
Se trata de Julián Ezequiel Ramón (24), cuya indagatoria estaba prevista para ayer y fue prorrogada para hoy a pedido de la defensa de su defensor, Alejandro Borauski.
Ramón fue detenido el pasado martes y quedó a disposición del fiscal Moure, como sospechoso del homicidio del hermano de su novia, Gastón Bustamante (12), cometido el 21 de noviembre pasado durante un robo en su casa de Miramar.
No obstante, la familia de la víctima cree que no pudo ser él el asesino y hasta su novia y hermana del niño asesinado salió ayer a defenderlo públicamente ante los medios y dijo que confía «plenamente» en él al igual que sus padres.
Pero para los investigadores del caso hay elementos que apuntan a Ramón.
La prueba clave para la detención es una huella dactilar suya que fue encontrada en un televisor que había en la escena del crimen y que estaba preparado como para ser robado.
El fiscal de la causa, Moure, explicó que «si bien no se puede determinar la antigüedad de las huellas, los peritos dicen que son contemporáneas con el homicidio, es decir, no pudieron estar allí durante más de veinticuatro horas».
Según las fuentes, el ahora imputado se encargó en los últimos días de «plantar» escuchas telefónicas, sabiendo que tenía la línea intervenida, y le dijo a un amigo que no se acordaba si había tocado alguna vez el televisor.
Moure dijo que la plata robada de la casa no estaba adentro del aparato, pero tal vez el asesino haya simulado trasladar el televisor para hacer pasar el hecho por un robo más ordinario o para desarmarlo a ver si estaba la plata adentro.
Otro dato recabado por los investigadores es que Ramón tenía deudas, ya que en su casa se secuestró un cuaderno manuscrito con ítems que sumaban 20.000 pesos y la leyenda «Los necesito ahora».
Por esa razón, creen que fue a la casa de su novia a robar, aunque solo se llevó 500 pesos porque otros 20.000 que había escondidos en la habitación de los padres no los encontró.
Moure resaltó que el detenido era la única persona fuera del entorno familiar directo que conocía sobre la existencia de dinero en esa vivienda.