La presidente Cristina de Kirchner se reunió este lunes en Nueva York con el magnate George Soros, uno de los empresarios más importantes del mundo, antes de brindar su discurso en la Asamblea General de las Naciones Unidas, con una marcada expectativa por el pronunciamiento que hará sobre el conflicto con Irán por el atentado a la AMIA.
Cristina de Kirchner recibió a Soros a las 18.15 hora local (19.15 de Argentina) en el piso 54 del hotel Mandarin Oriental, donde se hospeda junto a su comitiva, y allí mantuvo una reunión a “agenda abierta” por espacio de una hora.
La jefa de Estado subrayó que el magnate auguró para la Argentina “un futuro muy promisorio por su capacidad agroalimentaria”, al brindar detalles del encuentro. En declaraciones a la agencia Télam, indicó que junto al empresario se dialogó “principalmente de la agricultura en el mundo contemporáneo y se destacó el rol que desempeña la argentina como un actor principalísimo”.
A la vez indicó que durante la reunión también “nos referimos a otros rubros de importancia para la Argentina como lo son la tecnología y la ciencia”.
Soros, empresario de origen húngaro nacionalizado estadounidense, posee negocios en varios países del mundo, entre ellos la Argentina, donde invirtió en bioetanol y se desprendió de acciones de YPF poco antes de que fuera nacionalizada por el Gobierno argentino.
Luego de esa reunión, la mandataria se trasladó a la sede del Consulado argentino, ubicado en la zona del Central Park, donde visitó la muestra “Evita: Pasión y acción”, que recorre la vida e historia de Eva Duarte a través de fotografías inéditas y objetos personales.
Para este martes, la jefa de Estado tiene establecido el tercer turno para dar su mensaje ante la Asamblea General, a partir de las 15.30 (16.30 hora argentina), en medio de un fuerte hermetismo sobre la postura que adoptará en torno a Irán.
Sucede que ese país pidió a la Argentina una reunión entre los cancilleres de ambos países para hablar sobre el reclamo del Gobierno nacional contra Irán por el cual se acusa a ex funcionarios de esa nación como responsables el atentado a la mutual judía perpetrado en 1994.
Sobre la reunión hubo varias y idas y vueltas, pero hasta el momento estaría en pie el encuentro entre Héctor Timerman y su par iraní Alí Akbar Salehi en Nueva York, tras el visto bueno que habría dado Cristina de Kirchner.
En el medio, existe un malestar de la comunidad judía argentina, que reclama al Gobierno que vuelva a endurecer su postura hacia Irán, luego de haber repudiado una posible apertura de diálogo que promueve esa nación para llegar a un entendimiento en torno a la denuncia de la Argentina en su contra.
En ese contexto, las autoridades de las entidades judías argentinas -que por primera vez desde que el kirchnerismo llegó al poder no fueron invitadas en la comitiva- pidieron también que la delegación nacional vuelva a abondar sus asientos cuando le toque hablar al presidente iraní ante la Asamblea de la ONU, algo que la Argentina dejó de hacer el año pasado.
Se espera, por otro lado, que el mensaje de Cristina tenga una nueva exhortación al Reino Unido para que acepte sentarse a negociar una salida al conflicto por las Islas Malvinas, tal como establecen las resoluciones de la ONU que viene siendo ignoradas por la nación europea.
Además volverían a escucharse nuevos cuestionamientos de la mandataria argentina al manejo de la crisis internacional que impulsa la Unión Europea y también reclamaría cambios en el actual Consejo de Seguridad de la ONU.
La visita de la Presidente a los Estados Unidos también dará lugar a una movilización en contra su gestión, que se está organizando mediante las redes sociales hacia Columbus Circle, a metros del hotel en donde se hospeda la mandataria.
La marcha se realizará con consignas similares a las que impulsaron la movilización del pasado jueves 13 de septiembre en la Plaza de Mayo y otros puntos de Argentina.
Como parte de su actividad en la sede de Naciones Unidas, este martes Cristina, antes de su discurso, también participará previamente del tradicional almuerzo que el secretario general del organismo, el surcoreano Ban Ki-moon, ofrece a las delegaciones. En tanto, tras su exposición concretará encuentros bilaterales con el propio Ban Ki-moon, y otro con su par egipcio, Mohamed Morsi.
El miércoles, la presidenta viajará hacia Washington para inaugurar la cátedra Argentina en la universidad de Georgetown y visitar la sede del Banco Interamericano de Desarrollo, donde se reunirá con el titular del organismo, el colombiano Luis Alberto Moreno.
En el cierre de su actividad, el jueves, la Presidenta recibirá al presidente de Exxon Mobile Corp, Rex Tillerson, en Nueva York, y luego visitará la universidad de Harvard antes de emprender su regreso al país.
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