La presidenta Cristina Fernández de Kirchner ingresó nuevamente a la Fundación Favaloro en donde ya está acondicionada una habitación y una sala especial para atenderla, en caso de que se requiera una internación más prolongada.
La mandataria será sometida a nuevos exámenes médicos para evaluarla y determinar si debe ser sometida a una operación para drenarle el líquido alojado en la membrana que recubre el cerebro.
De esta forma, Cristina continúa con el seguimiento del cuadro de «colección subdural crónica», un coágulo en la cabeza producto de un traumatismo que sufrió el pasado 12 de agosto, con el que fue diagnosticada el sábado pasado por el cual los médicos tratantes le dieron 30 días de reposo.
Un dato relevante es que esta mañana el vicepresidente Amado Boudou firmó ante el escribano general de la Nación el traspaso de la presidencia, algo que en principio no estaba previsto ya que la intención del Gobierno era que sea la propia Cristina la que siga tomando las decisiones de gestión. Quizás la delegación de facultades y la internación abre dudas sobre cuál será el tratamiento que recibirá la mandataria y si finalmente será sometida a la cirugía.
Cristina entró a la clínica a las 13, proveniente de la residencia de Olivos en donde guarda reposo de 30 días, por el ingreso de Venezuela 1749, en el asiento del acompañante en el auto en el que habitualmente se traslada, custodiada por tres coches y una moto. Al momento de pasar ante los periodistas apostados en la puerta, la mandataria realizó un ademan de saludo.
En la puerta de la calle Venezuela ya fue montado un operativo de seguridad por lo que se colocaron tres vallas de seguridad y se apostaron dos patrulleros y seis policías, además de cuatro miembros de la seguridad presidencial.
El sábado a las alrededor de las 21.30, en un comunicado leído en Casa de Gobierno el vocero presidencial Alfredo Scoccimarro había informado que «la Presidenta se realizó un estudio cardiovascular en la Fundación Favaloro y debido a que presentó un cuadro de cefalea, se realizaron estudios neurológicos con un diagnóstico de colección subdural crónica y se le indicó reposo de un mes».
Desde la noche del sábado, la Presidenta se encontraba en la residencia de Olivos donde llegó luego de pasar nueve horas de internación en la Fundación Favaloro. Desde ese momento, Cristina está acompañada por su hijo Máximo y su familia, y por miembros del círculo íntimo como el secretario legal Carlos Zannini.