La presidenta Cristina de Kirchner encabezó en Lincoln el acto inaugural del ramal ferroviario que unirá esa localidad bonaerense con Realicó, provincia de La Pampa.
La mandataria llegó a la estación ferroviaria de Lincoln a bordo de una formación especialmente adaptada para la oportunidad, acompañada por Juan Pablo Schiavi, secretario de Transporte de la Nación.
Durante el acto sostuvo que «hay que estar unidos, tirando para el mismo lado» y remarcó que uno de sus «grandes sueños es industrializar la ruralidad». Se basa, explicó, en que «pequeñas y medianas industrias en cada uno de los pueblos rurales agreguen valor para el mercado interno».
«En Argentina, la participación de las pymes en las exportaciones es de 15%, el triple que en América latina», aseguró.
La mandataria agregó que «somos el país que mayores empresas de biotecnología tiene en Latinoamérica: 2,3 cada 100 mil habitantes» y que en la actualidad «tenemos capacidad de generar excedente alimentario y producimos alimentos para 400 millones de personas».
En comparación a la década del ’90, dijo que antes «se pensaba que podían crecer unos pocos, sin producir bienes y servicios, mientras el resto del país se derrumbaba», porque existía una «subordinación cultural a lo que nos decían de afuera, mientras que con el actual modelo «generamos el PBI más importante en 200 años de historia». «A veces hemos sido un poquito giles, porque nos comimos el verso que venía de afuera», sostuvo.
«Hemos encontrado el rumbo, donde la producción, la industria y los científicos suman esfuerzos para seguir creciendo», añadió. «Tenemos que estar muy orgullosos y ser alegres por las cosas que hemos hecho», dijo sobre el final del discurso, para concluir: «Con trabajo y esperanza, las cosas finalmente llegan. Lo más importante es que cuando se termine el tiempo de uno, haya otro que tome la bandera y siga adelante».