Cristina de Kirchner instó a los mandatarios de América del Sur a superar la crisis económica internacional con el fomento del consumo y la incorporación de los sectores más vulnerados al mercado interno. «Si hacemos las cosas bien, si somos inteligentes, si no somos mezquinos, más allá de la diferencias entre los gobiernos, podemos generar bienestar para nuestros pueblos», advirtió durante el acto de firma de acuerdos bilaterales con su par boliviano, Evo Morales, en la localidad de Cochabamba.
«Mantuvimos una excelente jornada de trabajo, primero con una reunión bilateral, y más tarde con una ampliada, con funcionarios de ambos gabinetes, con acuerdos muy fructíferos para ambos países», afirmó la presidenta al tomar la palabra.
Los mandatarios se reunieron por la mañana en el hotel Gran Cochabamba en el marco de una visita oficial de la jefa de Estado de dos días al país andino. Los convenios suscriptos están relacionados a hidrocarburos, salud, educación, intercambio en ciencia y tecnología e integración.
El más importante de los acuerdo sellados entre Argentina y Bolivia prevé la ampliación en el volumen de gas que se importa del vecino país, por el cual se recibirán 16,3 millones de metros cúbicos por día en lo que resta del año, superando la previsión de 13,6 millones vigente hasta la actualidad, mientras que en 2013 trepará a 19,2 millones de metros cúbicos diarios. De esta manera, ambos Estados acordaron adelantar los plazos del acuerdo vigente de 2010.
El acuerdo del gas se concretó al cabo del encuentro mantenido por el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, directivos de Enarsa; el titular de Yacimiento Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YCFB), Carlos Villegas, y el ministro de Hidrocarburos boliviano, José Sosa.
Ambos países firmaron además un convenio relacionado a la asistencia en materia de implementación de la TV Digital en Bolivia, y por último una carta de intención para la compra de GLP (gas licuado de petróleo), en una medida que apunta a dar prioridad a Bolivia y así reafirmar la integración entre ambos países.
Motores
Al término de la firma, Cristina destacó la vinculación económica de los distintos gobiernos y pueblos de América del Sur y abogó por enfrentar unidos una crisis muy fuerte, quizás más fuerte que la del 2008 y 2009. «Nuestras economías emergentes del sur han sido las que motorizaron la salida de la crisis anterior. Tenemos un mercado de cientos y cientos de millones de sudamericanos y muchos que incorporar, incluir a los servicios de consumo. Si todavía hay gente que incorpora, tenemos una inmensa oportunidad», aseguró.
«Podemos convertir a la región en la protagonista del siglo XXI», agregó, al tiempo que destacó los recursos hidrocarburíferos, acuíferos y alimenticios. «Somos proveedores naturales de alimentos y la demanda es inelástica, el mundo demanda alimentos. Podemos producir con grandes excedentes, no sólo para mantener a nuestra poblaciones sino para exportar», continuó.
En un mensaje a Morales, pero también a los otros mandatarios de la región, la jefa de Estado expresó: «Si hacemos las cosas bien, si somos inteligentes, si no somos mezquinos, más allá de la diferencias entre los gobiernos, podemos generar bienestar para nuestros pueblos. Tenemos los recursos, los elementos. Hasta ahora hemos llegado en momentos difíciles a acuerdos distintos en un mundo álgido».
A su turno, Morales sostuvo que Argentina y Bolivia «lucharon contra la dominación colonial y hoy luchan juntos por la justicia social» y destacó los acuerdos alcanzados. El líder cocalero manifestó la voluntad de ambos países para «expandir los mercados internos» como parte de «las nuevas políticas económicas» que impidan «ser victimas de la crisis del capitalismo».
«Esta tierra, la Pachamama, sigue dando más recursos naturales», afirmó Morales al referirse a los recursos naturales que la región deberá administrar en «beneficio de la humanidad».
Tras la firma de acuerdos, la Presidenta visitará el monumento de las Heroínas de la Coronilla, sitio en el que rendirá homenaje a las mujeres que hace 200 años resistieron el avance español sobre Cochabamba, para luego emprender el regreso al país.