Sin anuncio previo, el presidente uruguayo, José «Pepe» Mujica, llegó hoy a para formalizar sus reclamos por las trabas comerciales ante su par Cristina Kirchner, quien le prometió dar tratamiento preferencial a los productos del vecino país.
El mandatario oriental viajó a la Argentina en horas de la tarde y tras el breve encuentro de 45 minutos con la jefa de Estado retornó rápidamente al país vecino.
«La solución se dará en el marco del Mercosur, en el marco de tratamiento de asimetrías para países pequeños, como un elemento de discriminación positiva, una preferencia para economía uruguaya en las medidas que toma Argentina», dijo el número dos de la cartera de Economía uruguaya, Luis Porto, quien participó del encuentro junto a Mujica y el embajador Guillermo Pomi.
Por su parte, el vocero presidencial argentino, Alfredo Scoccimarro, se limitó a informar que la entrevista se extendió por el lapso de «media hora» y fue con «agenda abierta».
«Hablaron de todos los temas a agenda abierta. Forma parte de las reuniones periódicas que mantienen ambos presidentes», aseguró Scoccimarro en diálogo con la prensa, aunque evitó precisar qué se habló sobre las trabas comerciales, que en los últimos meses provocaron una caída de las ventas uruguayas.
Por el lado uruguayo, en cambio, confirmaron que en el encuentro los mandatarios dialogaron «sobre las medidas que afectan el intercambio económico entre ambos países».
El mandatario uruguayo arribó al país en un helicóptero que aterrizó directamente en la residencia de Olivos.
Si bien aquí no se había informado que la agenda de la Presidenta contenía el encuentro con Mujica, fuentes de la administración oriental consultadas por Noticias Argentinas señalaron que la entrevista ya estaba pautada de antemano.
El mandatario uruguayo estuvo acompañado por su embajador Pomi y el economista Porto, mientras que junto a Cristina estuvo el secretario Legal y Técnico de la Presidencia, Carlos Zanini.
«A partir de esta reunión se van a disparar seguramente algunos encuentros de trabajo para afinar mecanismos que permitan la defensa de los puestos de trabajo en Uruguay», afirmó Porto sobre la reunión, que según él duró «45 minutos».
Tal como explicó Porto en declaraciones publicadas por el portal de la Presidencia de Uruguay, «el motivo del viaje estuvo vinculado al tema de las medidas que se han estado gestionando en Argentina y que afectan a una cantidad de países y a todas las importaciones de esa nación».
«Esas medidas también afectan a Uruguay y es necesario buscar alguna solución o mecanismo que permita que los efectos no sean tan importantes en nuestro país o por lo menos le brinden una cierta previsibilidad a los empresarios y a los trabajadores uruguayos respecto a sus fuentes de trabajo y a sus capacidades productivas», señaló.
De todas formas, Porto aclaró: «Fue un diálogo y no una reunión para un acuerdo, con la finalidad de discutir posibles mecanismos de solución y comenzar a trabajar en ellos. En eso quedamos».
El economista señaló también que en los próximos días «se afinarán técnicamente algunos mecanismos que permitan que las economías pequeñas como Uruguay en el marco del Mercosur tengan un tratamiento preferencial en las medidas que está tomando la República Argentina».
A la vez, se confirmó que durante la reunión se conversó sobre la posibilidad de intercambiar en la moneda local de cada país como mecanismo de apoyo a este proceso, con la finalidad de que no sea necesario el dólar para las exportaciones e importaciones entre ambas naciones.
Cristina y Mujica «también dialogaron sobre la situación internacional y especialmente sobre la ´inyección` de dólares en Estados Unidos y en euros por la crisis en la Unión Europea (UE)», explicó la Presidencia oriental.
«En ese marco es necesario buscar el fortalecimiento de la complementación y la integración productiva regional para la defensa de los puestos de trabajo a nivel regional, destacó el funcionario», agregó.
El encuentro se produjo antes de que los dos mandatarios coincidan este fin de semana en la Cumbre de las Américas que se realizará en Cartagena de Indias, Colombia, y en medio de los reclamos uruguayos por trabas al comercio con Argentina.