Un joven, de 18 años, fue baleado este jueves por la mañana por una dupla de encapuchados que lo persiguió y le disparó a metros del ingreso al Estadio Brigadier López, la cancha de Colón, en Gobernador Freyre al 900. Este ataque puso en alerta máxima a los funcionarios del Ministerio de Seguridad porque se produce a tres días de celebrarse el clásico santafesino y porque también a la víctima, a quien ya le dispararon hace 15 días, se la vincula con la facción de la barra sabalera «Los de Siempre» que está en una disputa continúa con «La Negrada».
Esta semana se conoció que la cartera de Seguridad dispuso unos 950 policías para custodiar a los 40.000 hinchas sabaleros que ingresen a la cancha conocida como el Cementerio de los Elefantes, aunque no informaron si harán alguna medida especial para prevenir algún cruce entre las dos facciones de la barra como pasó en partidos anteriores que le valieron causas penales para sus líderes.
De acuerdo con voceros policiales, este jueves alrededor de las 10 los clientes y empleados del supermercado Alvear se sorprendieron por la irrupción de un joven ensangrentado que pedía ayuda en avenida Gobernador Freyre entre Pietranera y Juan José Paso. Mientras lo socorrían, alcanzó a decir que dos gatilleros le habían disparado mientras esperaba el colectivo para ir a trabajar.
El chico, identificado como Santiago “Turrito” O., tenía balazo en el hombro izquierdo y el otro en la pierna derecha. Fue trasladado por personal del Sies hasta el Hospital José María Cullen de urgencia debido a que uno de los proyectiles le afectó la arteria femoral y perdió mucha sangre. Quedó internado en la sala de cuidados intensivos debido a que había perdido mucha sangre.
Voceros oficiales explicaron que la principal hipótesis es que el ataque se trató de una disputa entre integrantes de las facciones «Los de Siempre», que intenta mantener el liderazgo del paravalanchas a través de Orlando “Nano” Leiva, y «La Negrada», que disputa ese poder a través de Brian “Chucky” Ríos.
Tanto Nano Leiva como Chucky Ríos están detenidos por causas en el fuero provincial relacionadas a violentos choques anteriores entre los simpatizantes de ambos bandos. El último antecedente en un partido fue el 29 de mayo pasado cuando Colón recibió a Central Córdoba en su cancha y hubo enfrentamientos que terminaron a los tiros y con autos baleados.
Si bien las fuentes vincularon al joven herido con el sector «Los de siempre», su madre lo desmintió en declaraciones a la prensa local y aseguró que tanto su hijo como su familia son «gente de trabajo».
La mujer añadió que los dos atacantes están identificados y que fueron los mismos que ya habían disparado contra su hijo el 13 de septiembre pasado en Vera Mujica al 800 –también en barrio Centenario–, aunque en esa ocasión el balazo no causó heridas de consideración. A esta balacera, los investigadores también la ubicaron en el marco de los enfrentamientos en la interna sabalera.
En cuanto a esos sospechosos, cuyas identidades no fueron informadas, trascendió que eran parte de «La Negrada», que es relativamente nueva y que tiene su base en el barrio Fonavi San Jerónimo, ubicado a metros del estadio.
Operativo clásico
La interna de la barra de Colón es la principal preocupación de las autoridades del Ministerio de Seguridad de Santa Fe de cara al clásico del domingo, al que sólo puede concurrir la parcialidad local.
El ministro Claudio Brilloni dijo el martes último que van a brindar «cuidados y refuerzos especiales» al operativo de seguridad, que empleará unos 950 agentes de la Policía de Santa Fe. El funcionario remarcó que se puso el foco en las puertas 1 y 6: ingresos a las populares norte y sur respectivamente, por las cuales acceden las dos facciones La Negrada y Los de Siempre.
