La ministra de Salud de la provincia, Sonia Martorano, encendió las alarmas luego de advertir, durante el último parte epidemiológico, sobre un posible retroceso de fase ante el avance de casos de coronavirus. Esto puede afectar a un listado de actividades que deberían abandonar la etapa de nueva normalidad para volver al parate a modo preventivo.
Entre las autoridades provinciales preocupa la evolución de casos y siguen de cerca la disponibilidad de camas de terapia. Martorano evaluó que «si los indicadores ponen esta nueva fase en tensión, tendríamos que cambiar a una fase anterior de aislamiento».
Hay nueve puntos, o actividades habilitadas que diferencian la fase cuatro (actual) con la fase tres:
- Actividades religiosas
- Actividades deportivas (impliquen o no contacto físico entre participantes)
- Reuniones familiares
- Concurrencia a bares, restaurantes, cementerios, museos y bibliotecas
- Pesca deportiva y recreativa
- Enseñanza y aprendizaje de disciplinas artísticas
- Actividad artística y artesanal a cielo abierto
- Salidas breves para caminatas y esparcimiento
- Concurrencia a shopings
«Estamos viendo ciertos indicadores que seguimos muy de cerca, que tienen que ver con la duplicaión de casos, con los diferentes brotes y con algo muy importante que son el número de camas críticas, que eso nos va a demostrar si hay estrés en el sistema de salud», manifestó la titular de la cartera sanitaria durante el reporte de este martes.
Las nueve actividades serán una variable de ajuste en caso de recrudecer la situación epidemiológica en el territorio provincial. Desde los sectores comerciales potencialmente afectados, ya manifestaron su preocupación ante la posibilidad de tener que volver a a la inactividad.