Los impuestos PAIS y a los débitos y créditos en cuenta corriente recaudaron entre enero y agosto de este año $2,2 billones, que representa el 9,5% de los ingresos tributarios, según los datos informados por el Ministerio de Economía y la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip).
El ministro de Economía, Sergio Massa, adelantó que impulsará una reforma para que parte de lo recaudado por estos dos impuestos sea coparticipado con las provincias, a modo de compensación por la pérdida que sufrirán por la reducción de mínimo no imposible en el impuesto a las Ganancias.
De acuerdo a estudios privados, los gobernadores cederán por la reforma unos $ 500.000 millones, que podrían recuperar por la vía propuesta por Massa.
El impuesto a los débitos y créditos -más conocido como impuesto al cheque- fue creado por el ex ministro de Economía, Domingo Cavallo, en 2001 en uno de sus tantos intentos por salvar la convertibilidad.
Fue presentado como un gravamen “transitorio” que finalmente se volvió permanente y su recaudación fluctúa en parte al ritmo de la actividad económica.
Desde enero y hasta agosto el impuesto al cheque recolectó $1.666 millones con un alza interanual de 114,8%, en línea con la inflación. Este resultado fue posible porque en agosto aumentó 138,2% a $277.762 millones.
Este salto fuerte salto se explica por la suba de precios post devaluación que impulsó la inflación mensual a 12,4%.
En tanto, el impuesto PAIS recaudó en agosto $211.902 millones, sextuplicando lo que había aportado en el mismo mes del año pasado.
Durante el mes pasado impactó plenamente la ampliación de este impuesto a las importaciones de determinados rubros.
De esta forma el impuesto PAIS agregó en ocho meses $530.787 millones, con un alza de 155,4% en comparación con el mismo período del año pasado. Del monto acumulado, el 40% fue recaudado sólo en agosto.
La propuesta de Massa sería incluida cuando se realicen las adendas al presupuesto que fue presentado el 15 de septiembre pero que será discutido luego de las elecciones.
“Los gobernadores me han propuesto y vamos a incorporar como una adenda a la presentación del presupuesto, un mecanismo de coparticipación de parte del impuesto al cheque y parte del impuesto País para cuidar las cuentas de las provincias y quiero también asumir ese compromiso aquí”, señaló Massa tras un encuentro con mandatarios del Norte del país.
La iniciativa propone coparticipar el 25% de la recaudación del impuesto al cheque y el 35% de la recaudación del Impuesto País.
Con los números actuales serían unos $400.000 millones y $160.000 millones, respectivamente.