Dos policías bonaerenses fueron desafectados de sus funciones por golpear e intimidar a dos adolescentes que estaban en la calle durante el aislamiento social, preventivo y obligatorio por el coronavirus. El abuso fue perpetrado en el partido de Avellaneda, informaron fuentes judiciales este martes.
Se trata de los oficiales Lucas González y Carlos Sosa, quienes fueron grabados por una cámara de seguridad que captó el momento del hecho ocurrido frente al hospital Fiorito, ubicado en avenida Belgrano al 800, en la zona sur del conurbano.
«Hoy nos llegaron estas imágenes. Los policías ya están identificados. Nos comunicamos con el Ministerio de Seguridad de la provincia para pedir los sumarios correspondientes y también dimos intervención a la Dirección de Niñez de Avellaneda», publicó el intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi, en su cuenta de Twitter.
Fuentes judiciales informaron que la fiscal María Soledad Garibaldi, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 4 de ese distrito, imputó a los policías por «abuso de autoridad».
Hoy nos llegaron estas imágenes. Los policías ya están identificados. Nos comunicamos con el @SeguridadProv para pedir los sumarios correspondientes. También dimos intervención a la Dirección de Niñez de Avellaneda. pic.twitter.com/uTwLjVaWeL
— Jorge Ferraresi (@jorgeferraresi) March 30, 2020
El hecho ocurrió ayer por la noche cuando los efectivos que iban en un patrullero observaron que dos adolescentes de 15 años estaban en la vereda incumpliendo la cuarentena.
De acuerdo a las imágenes que se viralizaron por las redes sociales, un policía le dio puntapiés a uno de los chicos y el otro tomó su cachiporra para intimidar al que estaba sentado en el piso.
«Auditoría General de Asuntos Internos nos comunica que dispuso la desafectación de los policías Lucas González y Carlos Sosa. Celebramos esta medida necesaria en el camino a construir una fuerza de seguridad profesional, respetuosa y solidaria», confirmó el intendente.
La fiscal Garibaldi indagará en las próximas horas a los efectivos por «abuso de autoridad», mientras que los adolescentes quedaron a disposición del Juzgado de Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil en turno.
«No vamos a permitir estas prácticas bajo ningún contexto. Esta delicada situación exige compromiso y profesionalismo», concluyó Ferraresi en su red social.
La semana pasada, tres gendarmes fueron separados de sus funciones acusados de abuso de autoridad por haber obligado a caminar en cuclillas hasta sus casas a dos jóvenes que violaban el aislamiento obligatorio por el coronavirus en la villa 1-11-14 del barrio porteño de Flores..
Otros cuatro miembros de la misma fuerza son investigados por difundir por el altoparlante de un patrullero el audio de una película que alentaba a cometer delitos, en el partido bonaerense de La Matanza.
Y dos policías de La Matanza fueron separados por obligar a realizar ejercicios físicos y burlarse de siete jóvenes a los que demoraron porque violaban la cuarentena.