Jujuy vuelve a asistir a una compleja situación que estas últimas semanas se cobró cuatro vidas: la violencia de género. Durante la madrugada de este jueves y tras los distintos rastrillajes realizados en barrios de Palpalá, encontraron el cuerpo de Gabriela Cruz. Fue después de que detuvieran a su ex pareja quien, según la Fiscalía, confesó que la había matado y dijo dónde había enterrado su cuerpo.
Gabriela Abigail Cruz, de 24 años, había desaparecido el jueves de la semana pasada en el barrio Santa Bárbara en la ciudad de Palpalá. Gabriela tenía dos hijos, de 7 y 4 años. Fue vista por última vez cuando salió a comprar al negocio que se encuentra a una cuadra de su casa. La Fiscalía primero detuvo a su ex pareja y luego lo liberó por falta de pruebas en su contra, pero después logró que confesara.
De acuerdo con fuentes policiales y judiciales, el hallazgo se produjo este jueves por la madrugada en una zona de espesa vegetación en inmediaciones a las Serranías de Zapla donde los policías, por orden judicial, realizó rastrillajes en busca de Cruz, luego de obtener información sobre la existencia de un cadáver en esa zona.
«Se realizó un trabajo bastante meticuloso, se tenía identificado aproximadamente en dónde podría haber un cuerpo», dijo ya por la mañana el fiscal del caso Darío Osinaga Gallacher.
Las tareas en el lugar fueron realizadas por personal de Criminalista y del Ministerio Público de la Acusación, junto con bomberos, y «se actuó conforme establecen los protocolos para este tipo de situaciones», añadió el funcionario.
En el marco de la causa por la desaparición de la joven ya estaba detenida su ex pareja, quien, según el fiscal, «habría incurrido en reiteradas contradicciones», ya que primero dijo no saber nada y luego admitió haber tenido una discusión con ella.
Por su parte, fuentes policiales consultadas por la agencia de noticias Télam dijeron estos días el acusado «se quebró y confesó el crimen», lo que permitió la localización del cuerpo en ese lugar al que se accede por un camino interno.
El cadáver fue trasladado a la morgue del Poder Judicial de Jujuy, donde este viernes se le realizará la autopsia de rigor con el fin de determinar las causas de la muerte.
«Él es una persona violenta, se le iba a la manos y mi nieta se defendía», manifestó a la prensa Carmen Vega, abuela de Gabriela, quien junto a sus familiares recibió las condolencias de los vecinos del barrio Santa Bárbara, de Palpalá, quienes se manifestaron desde las 17 de este jueves en dicha localidad. La movilización como en estos días fue masiva y a medida que avanzaba la columna de personas, otros dejaron la indiferencia de lado y se sumaron.
La mujer contó además que el acusado «estuvo participando de los rastrillajes» para encontrar a su nieta antes de ser detenido, motivo por el cual lo calificó como «un cínico» para quien pidió «cadena perpetua».
La ex pareja de Cruz había sido demorado en primer momento de la investigación y se le secuestraron dos vehículos, aunque luego fue liberado.
Anteanoche, a partir de nueva evidencia, el hombre volvió a ser apresado y quedó ahora acusado del femicidio, causa que pasó a la Fiscalía Especializada en Delitos Graves Contra las Personas y Femicidios, a cargo de Diego Cussel.
La búsqueda desesperada de Gabriela comenzó al día siguiente de la desaparición de Iara Rueda, de 16 años, en la misma ciudad.
El cuerpo de Iara fue hallado este lunes y la autopsia determinó que la causa de su muerte fue por asfixia mecánica. Las organizaciones sociales, gremiales y de mujeres vienen denunciando desde el día en que desaparecieron la inacción de las autoridades para buscar tanto a Iara como a Gabriela.
Además de participar de los rastrillajes que llevaron adelanto los familiares de las víctimas y los cortes de la ruta 66 para denunciar negligencia de parte del gobierno en materia de violencia de género, los cuales sufrieron represión por parte de la Policía. El martes y en medio de movilizaciones en ciudades de toda la provincia jujeña, los y las manifestantes reavivaron su impotencia cuando se enteraron del femicidio de Roxana Mazala, una militante del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) de 31 años, quien fue envenenada por su pareja en la ciudad de Perico, a 20 kilómetros de Palpalá.
La escala de violencia contra las mujeres y la falta de políticas públicas serias para hacer frente no sólo a los ataque femicidas, responder a las denuncias por violencias contra mujeres y disidencias como también en activar la búsqueda apenas se denuncia una desaparición, fue el límite para la ciudadanía jujeña que este miércoles se manifestó por miles en la plaza central de la capital frente a la Casa de Gobierno.
Bautizada como una marea por las más de diez cuadras que abarcaron no sólo militantes de organizaciones sociales, sindicales y de mujeres y disidencias sino también la ciudadanía en general pidieron justicia por los femicidios de Cesia Nicole Reinaga, Iara Rueda, Roxana Mazala y por la aparición de Gabriela Cruz. El dolor, la impotencia y la bronca volvió a golpear este jueves por la madrugada a la sociedad de Jujuy cuando se enteraron del hallazgo del cuerpo de la joven madre, víctima de su ex pareja.
Antes de la masiva manifestación en San Salvador de Jujuy, la secretaria de Género de la Central de Trabajadores (CTA) de Jujuy, Romina Canchi, fue la encargada de contar la realidad por la que pasa la ciudadanía jujeña. “Estamos viviendo jornadas muy dolorosas. Sólo por nombrar las últimas semanas: tuvimos el femicidio de Cesia, una joven que desapareció, el gobierno no la buscó y a los 10 días apareció muerta. La semana pasada desapareció Iara y a las 24 horas Gabriela. El gobierno tampoco las buscó, y el lunes cuando estábamos en una marcha para reclamar su búsqueda, nos enteramos que apareció su cuerpo. Este martes Roxana fue envenenada por su pareja en Perico. Era una compañera militante del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) y el lunes había participado de la marcha para pedir justicia por Iara y para que aparezca Gabriela. Tenemos al menos tres femicidios y una compañera desaparecida en las últimas semanas. Cuando reclamamos por la aparición de las jóvenes, y justicia por ellas, la Policía nos reprime. Las movilizaciones son multitudinarias”, explicó Romina.
Jujuy: tres femicidios y una joven desaparecida encienden marchas en repudio por inacción del Estado
