«El Instituto de Aeronáutica Civil de Cuba comunica que se ha decidido reiniciar las operaciones aéreas comerciales, regulares y chárter en el Aeropuerto Internacional José Martí de La Habana, el próximo 15 de noviembre, a las 0 horas”, indicó anoche el portal oficial de noticias Cubadebate.
El protocolo sanitario establece que cada viajero, cuya temperatura se controlará en el aeropuerto, deberá realizar una prueba de PCR a su llegada a Cuba y luego limitar sus desplazamientos hasta tener los resultados de la prueba, generalmente 24 horas después. Cinco días más tarde, tendrá que hacerse otra prueba de PCR.
«Se ha previsto el cobro de una tarifa sanitaria, con el objetivo de cubrir los costos de los protocolos implementados», especificó Cubadebate, sin precisar el monto de esta tasa.
El aeropuerto de la capital será el último de la isla en reabrir, dado que otros cinco del país ya lo hicieron el 17 de octubre pasado, con la intención de relanzar una temporada turística devastada por la pandemia.
La crisis provocada por el coronavirus, sumada al endurecimiento de las sanciones impuestas por Washington, asestó un duro golpe a la isla, cuya actividad turística, uno de los principales motores económicos, ya venía en declive.
Entre enero y marzo de 2020, cuando las fronteras aún estaban abiertas, Cuba recibió 189.466 turistas, un tercio (36,3%) de las llegadas registradas en el primer trimestre de 2019.
El país, de 11,2 millones de habitantes, parece haber controlado la propagación del coronavirus con 7.392 casos, incluidas 130 muertes, una incidencia mucho menor a la de sus vecinos del Caribe y América Latina.