Dos versiones sobre un mismo hecho. La del conductor de un auto que acusó a un cuidacoche de rayar su vehículo con una moneda porque no le pagó la tarifa que le reclamó, lo que derivó en un hecho de violencia. Del otro lado, el trabajador informal aseguró que la discusión se generó cuando le sugirió que no vuelva a dejar el auto en la línea amarilla, al conductor no le agradó el comentario y tras un cruce de palabras se fue. Contó que no le dañó el coche, lo que se puede corroborar con las cámaras de seguridad del lugar. El juez Gustavo Pérez de Urrechu, si bien sugirió que se profundice la versión del imputado, dictó un arresto preventivo para el hombre de 30 días.
Un hombre denuncio que cerca de las 19.45 del sábado 13 de marzo en la zona de López y Balcarce dejó estacionado su auto. Dijo que en el lugar había una persona cuidando coches que se acercó y le pidió plata. El denunciante, que estaba en el interior del vehículo, le contestó que aún no se iba y el cuidacoches le rayó el capot y una puerta del auto con una moneda, luego abrió la puerta del lado del acompañante e intentó agredir a las personas que estaban en el interior, por lo que puso primera y se fue del lugar, aseguró. El conductor dio aviso al personal policial y el sospechoso fue detenido un rato después, contó una fuente fiscal.
Con esta versión el fiscal Rodrigo Urruticoechea de la Unidad de Flagrancia, imputó este lunes a Oscar Omar B. ante el juez Gustavo Pérez de Urrechu por el delito de daño. El hombre dio su versión de los hechos durante la audiencia. En declaraciones a LT8 la defensora oficial Nora Gaspire contó que su cliente dijo que el conductor se estaba retirando cuando tuvieron un entredicho porque le aconsejó que la próxima vez no deje el auto en línea amarilla. Le refirió que había inspectores de tránsito trabajando y se estaban llevando autos. Le pidió que no lo volviera a dejarlo en infracción porque no tendría posibilidad de evitar que se lo lleven.
Este comentario no le gustó al conductor, hubo un intercambio de palabras y el dueño del coche se ofendió y se fue, aseguró el sospechoso que aclaró que no le rayó el auto y que en la zona hay cámaras de seguridad con las que se puede corroborar que no lo dañó, lo que fue solicitado por su defensa ya que dicho material no estaba aún dentro de la pesquisa.
La defensora dijo que el trabajo que hace su cliente es un servicio que no está reglado y lo presta dentro de un radio determinado. Explicó que además del relevamiento de las cámaras, el juez sugirió otras medidas ya que hay versiones contrapuestas en el caso. Por ejemplo dijo que desde la defensa pidieron la pericia del auto para determinar si el rayón fue hecho con una moneda u otro elemento y en su caso si fueron utilizadas algunas de las dos monedas secuestradas.
Gaspire contó que la denuncia es por daño y no es habitual que se dicte una medida cautelar por este tipo de delitos que por lo general se transita en libertad, aunque ello no significa que el hecho no tenga sanción.
También habló de la necesidad de tener un buen trato hacia las personas que desarrollan estas tareas informales, ya que si bien hay quejas sociales muchas veces hay actitudes hostiles por parte de los conductores. Dijo que “uno puede decir que no va a aportar y no tiene obligación de hacerlo, no es una actividad reglada. Ello puede hacerse de buena manera, porque a veces se contesta mal y genera una reacción hostil”. Agregó que cuando hay una situación que pueda configurar un delito hay que denunciarlo y está bien que el dueño del auto haya denunciado. «Está perfecto que la justicia investigue y llegue hasta las últimas consecuencias, para eso nosotros también estamos, para hacer cumplir la ley y no hay exceso de la autoridad», aseguró al programa radial.
