El Mundial de Rusia marcará la quinta participación de Arabia Saudita en una fase final después de Estados Unidos 1994, Francia 1998, Corea-Japón 2002 y Alemania 2006. Doce años después regresa de la mano de Juan Antonio Pizzi, dentro de un grupo que le ofrece pequeñas posibilidades.
Consiguió la clasificación al finalizar segunda de su grupo asiático con Bert van Marwijk en el banco, pero el holandés renunció a seguir al no alcanzar un acuerdo de renovación. Luego llegó Edgardo Bauza, pero unos pocos malos resultados provocaron su destitución y la federación anunció finalmente en noviembre que Pizzi sería el elegido para preparar al equipo nacional en su viaje a Rusia.
Fue todo un concurso de entrenadores en apenas un año y ahora Pizzi tiene que trabajar en un tiempo récord para proponer una selección que pueda competir con dignidad en el Mundial. El objetivo es emular su Mundial de 1994, cuando superó la fase de grupos de la mano de futbolistas de su Liga local con Jorge Solari como DT.
El trío compuesto por Osama Hawsawi, Mohammed Al-Sahlawi y Taisir Al-Jassim será la referencia de un equipo que intentará pelear por dar la sorpresa. Uruguay es clara favorita en el Grupo A por delante de Egipto y Rusia, mientras Arabia Saudita aparece en las apuestas como probable cuarta de grupo. Pero nada es imposible.
“Me gusta la coherencia que tienen los jugadores. Esto es algo que quedó muy claro, tanto en los entrenamientos como en los partidos. Espero que podamos continuar con la misma pasión”, resume un ilusionado Pizzi.
Los llamados “Hijos del desierto” buscarán la difícil tarea de repetir su mejor actuación en una Copa del Mundo, cuando en Estados Unidos 1994 alcanzaron los octavos de final tras ser segundos en su zona detrás de Holanda, instancia donde cayeron ante Suecia por 3-1, conjunto que terminaría siendo tercero en el certamen.
El DT: Juan Antonio Pizzi
A pesar de ser una selección pequeña, sus dirigentes son muy exigentes y el reto del técnico argentino es mostrarse suficientemente competitivos en el Mundial y, quizá, dar alguna pequeña sorpresa accediendo a la siguiente fase.
La figura: Mohammed Al Sahlawi (Al Nassr)
El delantero es la gran figura de la selección saudita. Llega a la Copa del Mundo con la madurez y el aval de ser el máximo anotador de la zona asiática con 16 tantos. Es el delantero titular del Al-Nassr saudita, donde juega desde 2009.
La promesa: Abdullah Al Khaibari (Al Shabab)
Este joven volante es una de las alternativas más frecuentes que utiliza el entrenador cuando quiere cambiar el juego y las acciones del equipo.
El ausente: Houssain Al Mogahwi (Al Ahli)
El experimentado mediocampista fue uno de los cinco futbolistas que Juan Antonio Pizzi cortó en el último momento. No podrá disputar su segundo Mundial.
