El compositor, cantante y ex vocalista y guitarrista de Talking Heads, David Byrne, pasó por Buenos Aires para presentar su libro Diarios de bicicleta, un texto en el que aboga por un uso masivo del vehículo pedestre defendiendo la posibilidad de otro contacto entre la gente, en la actualidad diezmado por las modernas urbanizaciones y por los desmesurados parques automotores.
En Diarios de bicicleta, el artista estadounidense cuenta sus viajes a pedales por ciudades del mundo como Nueva York, Sydney, Manila, Berlín, Buenos Aires, Estambul, Londres y San Francisco que evidencian que la utilización de la bicicleta puede cambiar la visión del mundo y de la ciudad en la que se vive. El libro consta de textos y fotos por los lugares visitados: entre otros Los Ángeles, en California, donde crearon una calle artificial porque había gente que nunca había caminado por una, cuestiones que Byrne señala como desarticulaciones sociales. En el capítulo sobre Buenos Aires, Byrne se pregunta por qué nadie se mueve en bici en la ciudad para sugerir que la causa probable es “por cierta aversión cultural”. Diarios de bicicleta entonces es más la auscultación de las fallas del ejido urbano que una defensa a ultranza del vehículo de dos ruedas y expone a través de crónicas de viaje las perspectivas que eso confiere a los distintos recorridos, aunque también habla acerca de que las ciudades “son manifestaciones físicas de nuestras creencias más profundas y de nuestros pensamientos muchas veces inconscientes”. Tal vez por eso usar la bicicleta para Byrne no sólo es adictivo, sino que es “una excusión por el interior de la psique colectiva”.
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