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De la autonomía y las luchas por la emancipación integral

Por Carlos Solero.- Cornelius Castoriadis es uno de los pensadores más innovadores de la teoría social de la segunda mitad del siglo XX.


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Cornelius Castoriadis es uno de los pensadores más originales e innovadores de la teoría social de la segunda mitad del siglo XX. Su formación como filósofo y psicoanalista exhibe una magna erudición que se evidencia en todos sus libros y conferencias.

Una obra tan vasta y a veces compleja como la de Castoriadis requiere de estudios exhaustivos, la intención de esta breve nota es acercar al lector sólo a algunas de las temáticas y pensamientos que incitan a profundas reflexiones y son un verdadero revulsivo, en una era de desencantos inducidos.

El de Castoriadis es un esfuerzo intelectual que no busca las certezas, sino la indagación permanente y antidogmática. Un pensamiento sin ataduras que brinda claves para repensar a los filósofos antiguos y a los clásicos y contemporáneos, desde Platón hasta Karl Marx. La reflexión no es un mero ejercicio intelectual, sino una tarea orientada a las acciones transformadoras de la sociedad en sentido de una emancipación integral de las clases subalternas.

El concepto de imaginario social es una de las claves que permite analizar las sociedades contemporáneas buscando indagar críticamente las experiencias del movimiento obrero desde el siglo XX y los avatares de procesos revolucionarios que luego, en la etapa instituyente, derivaron en férreas dictaduras tecno-burocráticas como por ejemplo en Rusia.

Una vida intensa, activa

Cornelius Castoriadis nació en Constantinopla el 11 de marzo de 1922, tuvo que huir hacia Atenas con su familia por las consecuencias de la Guerra Greco-Turca. La vida y obra de Castoriadis pueden diferenciarse en dos etapas; la primera es la de su juventud en Grecia, donde padece la dictadura fascista, la Guerra Greco-Italiana y los inicios de la Guerra Civil griega, en esos años estudia  las carreras universitarias de derecho, economía y filosofía en la Universidad de Atenas. En la universidad tomará contacto  con la militancia en el marxismo-leninismo y posteriormente con el trotskismo. En una nota autobiográfica en su libro La Sociedad Burocrática, el propio Castoriadis narra esas experiencias. En el año 1946, cuando estalla la guerra civil en Grecia, se traslada a Francia. En este país continúa sus estudios de filosofía y se vincula al Partido Comunista Internacionalista (PCI), donde conocerá a Claude Lefort. Junto con este último  crean el grupo Socialisme ou Barbarie, en el cual se relacionó con figuras como Edgar Morin, Henry Lefebvre, Jean-François Lyotard, Guy Debord entre otros. La publicación se orientó en tendencias próximas a las ideas de Rosa Luxemburgo, la revolucionaria asesinada en Alemania luego del fracaso de revolución espartaquista de 1919 a las propuestas del moviendo de los Consejos Obreros, impulsados por el astrónomo holandés Anton Panekoek. Fue un firme defensor del concepto de autonomía política,  fundador en los años 40 del pasado siglo XX  del grupo político Socialismo o barbarie y editor de la revista del mismo nombre.

En 1948,  Castoriadis y su agrupación de compañeros de militancia abandonan el PCI marxismo y evoluciona hacia una perspectiva filosófica propia y a posiciones cercanas al socialismo libertario. Según reseñan sus biógrafos a partir de 1964, se hizo miembro de la Escuela Freudiana de París (EFP), fundada por Jacques Lacan, con quien comenzó a tener desavenencias en 1967.Es considerado uno de los filósofos referentes la revuelta obrera y estudiantil del Mayo francés de 1968, la famosa frase La imaginación al poder, está tomada de sus escritos. En 1976 escribe en Topique, a partir del libro Un destin si funeste de François Roustang, un largo artículo criticando el pensamiento de los llamados filósofos estructuralistas: Michel Foucault, Roland Barthes, Louis Althusser, Gilles Deleuze y Félix Guattari, así como el método y posturas de Jacques Lacan. A partir de 1974 comenzó a ejerció como psicoanalista. En el año1980, Castoriadis fue nombrado director de estudios de la École des hautes études en sciences sociales, allí continuó los trabajos publicados desde 1978 con Les Carrefours du labyrinthe, completando cinco volúmenes y uno póstumo. Pretendía con estos ensayos analizar fenómenos muy específicos a partir de lo ya expuesto en su célebre libro La institución imaginaria de la sociedad.

Algunas de las ideas

Imaginario social, este concepto aparece en su obra más conocida: La Institución Imaginaria de la Sociedad (1975), donde inicia el estudio de la creación humana y el factor imaginario. Con posteridad a La Institución Imaginaria de la Sociedad, el trabajo de Castoriadis se orienta a dilucidar y profundizar las líneas generales que fue explicitando en este libro, lo hará a través de una serie de obras como Las Encrucijadas del Laberinto (1978), Los dominios del hombre (1986), El mundo fragmentado (1990). Hecho y por hacer (1997), Post-scriptum sobre la insignificancia ( 1998), y Figuras de lo pensable (1999) y los seminarios en la Escuela de Altos estudios de Paris (1980-1995), estos últimos aún están en proceso de transcripción para su edición y publicación.

Heteronomía y autonomía Castoriadis insiste en la existencia y la necesidad de búsqueda de alternativas: el proyecto de auto-emancipación autónoma. Para Castoriadis, hasta el presente las sociedades han sido heterónomas, han construido sus imaginarios atribuyéndolos a alguna autoridad extrasocial: Dios, los Antepasados, la Necesidad Histórica, es decir, que las sociedades heterónomas no se dan cuenta de que las instituciones son autoconstruidas. Castoriadis piensa que la humanidad sólo podrá escapar a la catástrofe: si logra conocer el carácter autónomo de las instituciones imaginarias y teniendo la voluntad explícita de auto-instituirse, auto-emanciparse. Puede afirmarse que siguiendo estos lineamientos y reflexiones, plantearía la alternativa socialista de Socialismo o barbarie como: Emancipación autónoma de la humanidad  o barbarie.  Murió en París (Francia) el 26 de diciembre de 1997.

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