Search

De la Fuente, un rosarino que lucha por ser titular en Los Pumas

Tras el gran partido ante Georgia, dialogó con El Hincha y se mostró feliz por el momento personal que vive con el seleccionado argentino en pleno Mundial.

Después de la resonante victoria sobre Georgia, en el búnker argentino es todo alegría. Y Jerónimo de la Fuente también disfruta del momento: gran partido ante los europeos, muchos minutos en cancha y la inminente llegada de su familia a Inglaterra. “Son jugadores muy fuertes, en el contacto son muy físicos, nos sorprendieron un poco pero estábamos confiados que con nuestro sistema de juego se iban a cansar y se iba a abrir el partido”, sentenció Jerónimo de la Fuente en diálogo con El Hincha en referencia al partido con Georgia.

“Me tocó de sorpresa el ingreso, esperemos que la lesión de Juani (Hernández) no sea nada grave y se pueda recuperar. Me tocó defender mucho en esos cuatro minutos, entré en un momento que era clave para que no nos marquen para irnos con un poco más de confianza al entretiempo. Hicimos muchos penales en esa primera parte, que nos hicieron dudar. Fue lo que hablamos antes de salir al segundo tiempo, la idea era defender con prolijidad y después recuperar la pelota para plasmar nuestro plan de juego”, dijo De la Fuente con sentimientos encontrados, ya que es amigo de Juani Hernández, pero con la posibilidad de ser titular ante Tonga.

En cuanto al análisis de Georgia, el centro formado en Duendes expresó: “Son jugadores muy fuertes, en el contacto son muy físicos, nos sorprendieron un poco pero estábamos confiados que con nuestro sistema de juego se iban a cansar y se iba a abrir el partido. Teniendo paciencia, los espacios se iban a dar, porque los había, el problema fue que queríamos hacer el try en la primera jugada, no teníamos paciencia, la tirábamos afuera, hacíamos una demás, la idea era jugar con varias fases, que Georgia corra, que tenga que cubrir los espacios y se canse”.

El primer try de Juan Imhoff llegó con asistencia de De la Fuente, ambos son amigos desde la infancia, crecieron juntos en Duendes y disfrutan este Mundial. “La idea fue buscarlo para que corra, le di el pase, me caí y cuando me levanté ya había apoyado. Mi Dios! Cómo corre… (risas). Se festejó mucho por la amistad que tenemos, lo que significa en un Mundial un try y la alegría de poder compartirlo con él”, confió.

“Tenemos unos días de descanso, pero sabemos que el objetivo es Tonga. Vamos a ver que hicimos bien y mal, mientras tanto, descansar, recuperar lesionados y golpeados. Estamos muy metidos con lo que se viene. Son muy físicos también, nosotros tenemos que estar preparados para jugar un partido tan o más duro como lo fue ante Georgia”, comentó el back de Los Pumas.

Y enseguida se refirió a la competencia que existe en el seleccionado. “Uno trabaja para ser titular, arriba tengo a jugadores de un enorme talento. Esta Juani (Hernández) y Chelo (Bosch), y junto a Tute (Moroni), Rete (González Iglesias) y Juampi (Socino) entrenamos y peleamos por un lugar. Entre nosotros nos apoyamos mucho, nos alegramos cuando le toca a alguno. Me tocó a mí estar en los dos partidos, el próximo no se sabe que pasará, todos estamos dejando todo para tener un lugar en el equipo y eso hace que la competencia sea sana y muy buena”.

Y en el cierre contó sus sensaciones a partir de la llegada de su familia. “Estoy seguro que en Duendes lo vivieron muy intensamente. Llega la familia, seguramente Kelo (padre) le va a meter presión al staff (risas), con lo cual espero que no me juegue en contra”, bromeó entre risas.

De paso por Birmingham

En el camino rumbo a Leicester, El Hincha dejó atrás a Gloucester, pero antes de llegar a la ciudad donde Los Pumas jugarán dos partidos y buscarán la clasificación a cuartos, la cita ovalada se dio en Birmingham para presenciar el choque Sudáfrica-Samoa en el coqueto Villa Park, hogar del Aston Villa, que tuvo victoria de los Boks y el sorpresivo ingreso de un hincha sudafricano en el final.

Con el tiempo cumplido, sucedió lo inesperado:  un hincha con camiseta de los Springboks ingresó al campo de juego, los jugadores lo frenaron y luego la seguridad lo retiró de la cancha.

Sudáfrica llegaba al duelo ante los isleños con el peso de haber caído sorpresivamente en el debut ante Japón, su primera derrota en fase de grupos en la historia de los mundiales. Y esos fantasmas sobrevolaron Birmingham porque en el comienzo. Samoa arremetió, impuso rigor físico pero como es habitual en los seleccionados del Pacífico, no tuvo conducta táctica y en este nivel es difícil vencer a un equipo como Sudáfrica sin respetar un libreto.

Sin grandes lujos, los dirigidos por Heineke Meyer impusieron también su fortaleza y las individualidades hicieron el resto. Furie du Preez fue el generador y a los 30 del complemento, los Boks lograron el  tan ansiado punto bonus por apoyar cuatro tries, una unidad que seguramente cuando finalice la fase de grupos valdrá mucho.

10