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De milagro: cayeron con un ascensor y sólo sufrieron golpes

Los frenos de emergencia salvaron la vida de tres operarios en Puerto Norte. Se precipitaron del piso 11 al tercer subsuelo.

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“No sabemos cuál fue la falla. Afortunadamente respondieron los frenos de  emergencia y no tuvimos que lamentar ninguna tragedia. Mañana (por hoy) vamos a ir al Ministerio de Trabajo a pedir una inspección y ver qué es lo que se define”, anticiparon anoche a El Ciudadano desde el gremio de la construcción. La “tragedia” que por fortuna no ocurrió involucró a tres operarios que trabajaban en una de las construcciones del complejo Ciudad Ribera: por causas que no estaban claras, los trabajadores estaban dentro de un ascensor que se precipitó en caída libre desde un piso 11 y  paró su marcha en el tercer subsuelo, gracias a los frenos de emergencia. Y como el sistema estaba en perfecto funcionamiento, el repentino descenso de 14 pisos no generó más que algunos golpes.

El siniestro ocurrió en  la tarde de ayer en los edificios “Palco Paraná”. Un vecino del lugar explicó que hay dos torres habitadas: la 164 es donde ayer se precipitó el ascensor.

En la otra, la 158, en abril de este año ocurrió una explosión por una pérdida de gas que se cobró la vida de la joven Mariel Cataldo, de 21 años, quien falleció en el Heca por las graves quemaduras que había sufrido. Su pareja, Walter Beltrami, de 35 años, resultó herida pero logró sobrevivir.

Ayer las torres con vista privilegiada al río estuvieron otra vez bajo la lupa, pero con la fortuna a favor. La activación del sistema de frenado del elevador compensó la falla –nadie pudo explicar qué había sucedido– que hizo que la cabina cayera a toda velocidad con personas adentro.

Los obreros pudieron ser rescatados y fueron asistidos por los servicios de emergencia del Sies y un servicio particular donde fueron derivados a sanatorios privados: dos fueron trasladados al Sanatorio Parque y el otro al Plaza.

Según el Sies, el hecho ocurrió alrededor de las 15.30 cuando los trabajadores estaban haciendo tareas menores en el edificio y se disponían a bajar.  “Sólo tuvieron algunos golpes. El freno funcionó y sólo fue un susto. Revisaron a los empleados y sólo tienen hematomas y golpes, pero ninguna fractura, afirmaron desde la Uocra.

El delegado de la Uocra en la obra, Claudio Quintana, especificó que hay 90 empleados trabajando y que hoy se harán los peritajes pertinentes para saber cuál fue el motivo del siniestro. “Los muchachos están estables. Estaban haciendo retoques, ya que es una parte que está terminada. Se fue trabando de a poco el freno del ascensor y se pudieron salvar. Es un aparato nuevo, hace ocho meses que está en funcionamiento”, concluyó.

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