La intendenta Mónica Fein, junto al secretario de Cultura y Educación, Horacio Ríos, y el director cultural del Monumento Nacional a la Bandera, Hernán Colautti, presidió ayer a la mañana la presentación del programa oficial de Promesas a la Bandera 2015.
Estas actividades darán paso a las celebraciones por el Mes de la Bandera, durante las cuales más de 26 mil niños de todo el país prometerán lealtad a la enseña patria.
La ciudad recibirá este año a 26.500 alumnos de cuarto grado de varias escuelas del país. Los chicos prometerán lealtad a la bandera entre mañana y el próximo martes en el Patio Cívico del Monumento Nacional a la Bandera. En paralelo, se realizarán diferentes propuestas culturales y turísticas, que contarán con la participación de artistas locales, la Orquesta de Barrio Ludueña y la orquesta de la escuela Sargento Cabral de Puente Gallegos.
“Esta ciudad tiene un privilegio que debemos cuidar y proteger. Somos la cuna de la bandera. Cada vez que veo miles de niños de todo el país que vienen a nuestra ciudad a prometer lealtad a la bandera, siento un profundo orgullo y que tenemos un legado muy especial”, destacó la intendenta Fein ayer por la mañana. “Esos chicos se van con un recuerdo imborrable de lo que significa la patria y a lo que se comprometen. Si todos tomáramos el ejemplo de estos niños, y todos los días nos comprometiéramos con nuestra patria, seguramente construiríamos un mundo mejor para todos”, añadió.
El secretario Horacio Ríos, en tanto, dijo sentirse orgulloso de las actividades que se realizarán. “Los chicos no solamente disfrutarán del Monumento a la Bandera, sino también del Tríptico de la Infancia, el Planetario y otros elementos que seguramente harán mucho más atractiva la visita de esos niños a nuestra ciudad”.
Por su parte, el director cultural del Monumento a la Bandera, Hernán Colautti, destacó la labor de todos los que trabajan en el Monumento: “Sentimos una gran satisfacción y un orgullo muy grande por participar de estas Promesas de Lealtad a la Bandera”.
El acto contó con la participación de los subsecretarios de Gobierno, Claudio Díaz; y de Turismo, Diego Paladini; autoridades y abanderados de las escuelas Nº 1.267, Latinoamérica (distrito Centro); Nº 128 Congreso de Tucumán (distrito Sur); Nº 1102 Sargento Cabral (distrito Sudoeste); Escuela Río Paraná, (distrito Norte); representantes del Ministerio de Educación y del Ministerio de Innovación y Cultura provincial; de la Secretaría de Turismo municipal; de la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica de Rosario, del Fondo de Asistencia Educativa (FAE) y del Aeroclub Rosario, entre otros.
En caso de lluvia, la promesa de lealtad a la Bandera correspondiente a ese día se realiza en el Galpón 17 de la Franja Joven del río.
Un buen menú
La Asociación Hotelera Gastronómica de Rosario y la Dirección Cultural del Monumento a la Bandera convocaron a la participación de los distintos corredores gastronómicos a generar propuestas adaptadas a las necesidades de los chicos y las escuelas dentro del itinerario programado. En el marco del Menú de la Bandera, los establecimientos gastronómicos van a abrir sus puertas a los contingentes para ofrecerles calidad, hospitalidad y servicio. Asimismo, el barco “Ciudad de Rosario” se sumará a la propuesta general de las Promesas proponiendo circuitos educativos pensados para los niños de 4º grado.
“Los chicos saben lo que hacen”
El historiador y presidente del Instituto Belgraniano de Rosario, Miguel Carrillo Bascary, celebró una nueva edición de la promesa a la Bandera. Calificó al acto como emotivo y lo consideró uno de los primeros compromisos que toman los alumnos con la patria. “Los chicos se dan cuenta de lo que vienen a hacer”, aclaró. Y explicó que la bandera argentina significa, en este caso, “todas las tradiciones y valores que nos constituyen como argentinos”.
La tradición de promesa no tiene fecha de inicio, aunque se remonta a fines del siglo XIX. Carrillo Bascary explicó que en aquellos años los chicos no tendían a terminar la primaria.
Y aunque afortunadamente eso se ha superado, la tradición se mantuvo y son los alumnos de cuarto grado los que dan este primer paso de compromiso. Para el historiador, la llegada de decenas de miles de niños de todo el país ayuda a fortalecer la responsabilidad de los rosarinos de asumirse como Cuna de la Bandera. “Rosario es más que una ciudad violenta. La masividad de estos actos ayuda a demostrar que tenemos mucho para dar”, resumió.
