«Gran parte del plan de negocios de Aerolíneas va a poder sustentarse en el proceso de administración de los fondos previsionales por parte del Estado», dijo De Vido.
Añadió el ministro que sin esos recursos, «que hasta 2009 se dirigían a mercados internacionales que después nos prestaban al 20 por ciento», no hubiera sido posible «renovar la flota y mejorar los servicios».
El ministro, acompañado por los secretarios de Transporte, Juan Pablo Schiavi; de Coordinación, Roberto Barata; de Turismo, Enrique Meyer, y el presidente de la compañía, Mariano Recalde, encabezó el acto del que tomaron parte alrededor de 1.500 trabajadores de la compañía.
El programa fue presentado por el responsable de Finanzas de Aerolíneas, Axel Kiciloff, quien aseguró que con el desarrollo del mismo la empresa «logrará su equilibrio económico en 2014».
Previamente resumió la situación de la empresa a julio de 2008, en cinco ítems, entre los que citó la «flota antigua y heterógenea, que implica más gasto y complica la operación»; la pérdida económica con una deuda de más de 1.000 millones de dólares; un patrimonio negativo y deuda creciente; estructura inadecuada; y -por último- la irregularidad en la operación por demoras, cancelaciones, etc.
Kiciloff remarco que Aerolíneas tenía los aviones «más antiguos del mercado», con un promedio, 19,5 años de antigüedad.
Con el nuevo plan en marcha se piensa en bajarla a 4/5 años. Se refirió también a la «catastrófica» caída en la participación del mercado de cabotaja que paso de 86 por ciento en 2003 a 65 por ciento en 2008, lo que atribuyó a ineficiencia por la «sobredimensión» de la infraestructura en relacion a la operación y una inadecuada asignación de recursos.
En cuanto a los desafíos, el plan de negocios en marcha se centra en tres aspectos: hacer crecer la operación (aprovechando la demanda sin reducir la planta); lograr eficiencias en la estructura de costos y mejorar el producto (mejorando flota, regularidad, puntualidad y servicios).
El plan cuya ejecución encabeza Recalde vaticina un crecimiento de la demanda de pasajes del 55 por ciento en cinco años. Recalde en su exposición adelantó que la red internacional sumará en 2011 destinos tradicionales de Aerolíneas que por la mala gestión fueron abandonados como Nueva York, Londres y México.
La idea central, sin abandonar los vuelos internacionales, es concentrarse en la integración nacional y regional con más frecuencias, y elevando sustancialmente el volumen de operación para cumplir en 2014 con el objetivo de alcanzar los 10 millones de pasajeros anuales transportados.
Aerolíneas también está avanzando, incluso invitando a otras empresas locales, en una red con hubs (centros de trasbordo) en Ezeiza y Aeroparque, evitando vuelos triangulares. La idea es hacer Bariloche, Mendoza, Salta e Iguazú sin pasar por Buenos Aires. Otro objetivo a cumplir, es la reuperación del mercado brasileño que es muy importante y que se fue perdiendo del 2001 en adelante.
También minimizar los costos por asiento ofrecido; incrementar la operación aprovechando la estructura existente son también prioridades hasta el 2014. Un mencion aparte mereció la consolidación de los talleres con proyección internacional.
Al respecto la empresa se propone efectuar en talleres propios todos los chequeos mayores, dijo Reclade.
Además desarrollar un nuevo taller de motores, implementar capacitación en trenes de aterrizaje para la nueva flota ; crear talleres basicos en Aeroparque y mejorar la capacitación actual en las diferentes áreas.
Por último indicaron que las ventas de pasajes ya empiezan a mostrar este año «impresionantes mejoras». A modo de ejemplo, Recalde citó que en enero pasado subieron 25 por ciento y en mayo 78 por ciento respecto a igual mes de 2009
