A pesar de que la importación de energía erosiona las reservas del Banco Central, el ministro de Planificación, Julio de Vido, salió a garantizar ayer que continuará el esquema de subsidios a tarifas de luz y gas, en medio de versiones sobre su eliminación gradual.
Además, De Vido –responsable de la política energética desde el 2003– rechazó de plano que se estudie un incremento de las tarifas eléctricas y gasíferas.
Las palabras del funcionario se diferencian de lo que venían sosteniendo el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, y el ministro de Economía, Axel Kicillof, sobre que estaba en estudio la reducción de subsidios para los hogares.
Más Precios Cuidados
El funcionario hizo estas aclaraciones al anunciar la puesta en marcha de un “mecanismo similar a Precios Cuidados para la energía”, con el fin de “impedir que la especulación y las posiciones dominantes lleven a subas injustificadas”. De Vido aclaró el resultado de un encuentro que mantuvieron técnicos nacionales y provinciales del sector eléctrico, luego de que trascendieron versiones de que el objetivo de esa reunión fue presionar a las provincias para que avalen un ajuste tarifario. En un comunicado, De Vido señaló que “el objetivo del encuentro fue trabajar en mecanismos que eviten que las distribuidoras no reguladas por el Estado Nacional se apropien indebidamente de los subsidios que aporta la Nación”. El funcionario recordó que “un usuario con idéntico consumo, paga lo mismo por la generación eléctrica en cualquier lugar del país, pero la factura varía porque en el interior el costo del servicio de distribución lo establecen las provincias”.
“En línea con el gobierno”
“En este sentido, se trata de trabajar en línea con el esfuerzo que está realizando el gobierno nacional con el programa Precios Cuidados, para impedir que la especulación y las posiciones dominantes lleven a subas de precios injustificadas, como también estamos haciendo en el sector de la construcción, en diálogo con provincias y municipios”, enfatizó.
Según el ministro, “cualquier modificación de la política de subsidios o de las tarifas en el área de concesión de Edenor y Edesur es potestad propia y exclusiva del Estado nacional, sin que resulte necesario un acuerdo con las provincias”. Y añadió: “Es absurdo vincular estos temas con las declaraciones del jefe de Gabinete acerca de que puede estudiarse modificar los subsidios, ya que no tiene nada que ver con la conversaciones llevadas adelante con técnicos provinciales para cuidar los precios, en este caso de la energía”.
Asimismo, el ministro destacó: “El gobierno lleva adelante una política de subsidios para promover el consumo y el poder adquisitivo de los argentinos y la competitividad para la industria. Critican las políticas del gobierno como la que se propone en materia eléctrica o la de Precios Cuidados, porque quisieran que Argentina fuera hoy un reflejo de alguno de aquellos países que siempre La Nación y Clarín muestran como ejemplos a seguir”.
Repsol, por los intereses
La petrolera española Repsol anunció ayer que las acciones expropiadas de YPF fueron revaluadas en 5.000 millones de dólares, una cifra que la Argentina estaría dispuesta a cubrir con bonos a diez años de plazo, pero ahora la discusión sería por los intereses y las garantías del acuerdo.
Según informó la Bolsa de Comercio de Madrid, “al cierre del ejercicio 2013, atendiendo al principio de acuerdo anunciado en noviembre sobre las acciones de YPF SA e YPF Gas SA sometidas al proceso de expropiación, se revalúan las acciones en 5.000 millones de dólares”.
Sin embargo, fuentes diplomáticas españolas relativizaron la inminencia del acuerdo ya que, según alegaron, aún existen puntos por resolver y el principal está vinculado con el pago de los intereses acumulados.
