Karabo Mnisi, de 18 años, empezó a publicar en su Facebook fotografías donde se ven a algunos de sus amigos finigiendo estar muertos. El fenómeno se expandió rápidamente.
Fingir su muerte, tomarse una fotografía y luego publicarla en redes sociales. Esta es la propuesta de Karabo Mnisi, un joven sudafricano de 18 años, que, desde los primeros días del año, sacude las redes sociales con este fenómeno viral que ha generado todo tipo de reacciones.
La polémica campaña, denominada ‘Dead Pose Challenge’, que significa el reto de la pose del muerto, comenzó en la página de Facebook de Mnisi, donde el estudiante animó a sus amigos y seguidores a que le enviaran fotos posando como si estuvieran muertos. De todo el material que recibía, el joven publicó las fotos que consideraba mejor logradas. Las imágenes empezaron a ser compartidas masivamente llevando a otras personas a unirse y a seguir con la actividad.
Sin embargo, miles de usuarios denunciaron la brutalidad de algunas de las fotos por lo que el joven tuvo que retirar las más realistas para que no le suspendieran su cuenta. Además de ser tachado de bárbaro e insensible, Mnisi ha sido acusado de «satanismo» en su país.
«Empecé a posar como un muerto el año pasado, pero aún no subía las fotos a las redes sociales», cuenta a Efe Karabo Mnisi, que ya tiene 26.000 seguidores en Facebook y que dice no tener otro objetivo que «divertirse».
«Vivimos en un país serio con problemas serios. La gente necesita divertirse y relajarse, a veces», agrega el adolescente, quien señala que no cree que su proyecto pueda llevar a cometer actos violentos.
Los partidarios de Mnisi y quienes participan en el reto son por lo general gente joven, sin embargo también se han involucrado adultos que incluso hacen aparecer a niños en las fotos.
«Decidí hacerlo porque me pareció divertido hacerme el muerto y hacerme una foto. Pensé que podía mandar la mejor foto, la más original y graciosa, con un niño pequeño participando en el reto», explica a Efe el responsable de una de las poses más populares, Obakeng Bruno. En la imagen que le envió a Mnisi, Bruno aparecía con el cuerpo inerte sobre una mesa con salsa de tomate en la boca, mientras su primo, de 5 años, finge una expresión de desespero con las manos en la cabeza.