El juicio por el crimen de Ángeles Rawson continuará mañana con la declaración de 13 testigos que no pudieron concurrir a las audiencias anteriores, entre ellos un oficial del Servicio Penitenciario Federal (SPF) que asentó en un acta que a pocas horas de su detención el portero dijo en la alcaidía de Tribunales que las lesiones que tenía las había autoprovocado.
Esta semana, por un problema de agenda de los fiscales, no se realizó la habitual jornada de los miércoles y la decimoctava audiencia ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 9, se hará mañana a las 9.
Los dos primeros testigos de mañana serán Noemí Ruth Ghirardi y Esteban Toro Martínez, dos integrantes del Cuerpo Médico Forense (CMF) que analizaron en su momento las 34 lesiones que presentaba Mangeri al ser detenido.
Luego fue citado el subadjuntor Alejandro Murdoch, quien era jefe de turno de la Unidad 28 del SPF cuando Mangeri llegó detenido desde la División Homicidios a las 12.50 del sábado 15 de junio de 2013.
Según descubrió la querella en el legajo penitenciario de Mangeri, aquel mediodía Murdoch labró un “acta de lesión” donde consta que el propio detenido reconoce que las lesiones que presentaba en su cuerpo habían sido autoprovocadas.
«Las lesiones que tengo me las produje yo en la vía pública con un encendedor», dice con letra de imprenta manuscrita el acta que lleva la firma del propio Mangeri.
Para los acusadores, ésta sería una segunda autoincriminación del portero en el expediente, luego de que horas antes de su detención, en la Fiscalía de Instrucción 35 de Paula Asaro, dijera: «Soy el responsable de lo de Ravignani 2360. Fui yo».
El abogado querellante Pablo Lanusse solicitó el 22 de abril, al presentar este documento al TOC 9, que Murdoch declare como testigo nuevo, ya que quiere que confirme en el juicio cómo Mangeri le hizo esa referencia y si la letra es del propio imputado.
Las lesiones de Mangeri son un elemento clave de la acusación porque se cree que las excoriaciones que presentaba el portero fueron los rasguños que Ángeles le alcanzó a provocar en su intento por defenderse y que quedaron en evidencia cuando debajo de sus uñas se halló ADN del acusado.
Tal como ya lo declararon varios médicos policiales que revisaron a Mangeri en el juicio, también se cree que las ampollas que presentaba en el torso, brazos, espalda y mejillas, eran quemaduras autoprovocadas por el imputado para simular torturas y para tapar y enmascarar los arañazos que la víctima dejó en su cuerpo.
Otro miembro del SPF que testificará mañana ante el TOC 9 sobre el “acta de lesión” firmada por Mangeri será el ayudante de quinta Ricardo Maldonado.
Otros dos testigos serán Marcelo Alejandro Toledo y Damián Alejandro Manfredi, ambos empleados de la cochería Paraná, que realizó el servicio fúnebre de Ángeles, y aclararon en la causa que ellos fueron los que le entregaron al padre, Franklin Rawson, el cuarto anillo que la víctima tenía en una de sus manos y había quedado colocado porque en la morgue no se lo habían quitado.
El TOC 9 además escuchará a Pedro Emilio Durán, el médico de la Delegación San Martín de la Policía Científica bonaerense que el 11 de junio de 2013, en la planta de Ceamse de José León Suárez, levantó del cadáver e hizo un informe médico preliminar a la autopsia en el que estimaba que la causa de muerte era una asfixia y que había signos de abuso sexual, un dictamen que era acertado.
También fueron citados Camilo Gargiulo y Nahuel Hernán Formaro, los dos testigos del allanamiento que la fiscal Asaro hizo la noche del 11 de junio de 2013 en la Ceamse de Colegiales, desde donde partió el cadáver que terminó en la planta José León Suárez y donde Ángeles había hecho gimnasia el día de su desaparición, y los dos vigiladores del predio, Sergio Nicolás Kaluszka y Walter Darío Díaz.
Los últimos dos testigos serán Gustavo Salvador Pérez, el encargado del garaje de la avenida Santa Fe 5091 donde la madre y el padrastro de Ángeles guardaban su auto, un Chevrolet Celta, y Eduardo Bernando Imas, el padre del adolescente que el día del hallazgo del cadáver de Ángeles en la Ceamse y antes de que trascendiera en los medios, tuiteó que el cuerpo iba a aparecer en un camión de basura.
“Me la juego a que la chica desaparecida, va a aparecer en el camión del Ceamse muerta. No se olviden de que yo lo predije”, señalaba la cuenta de Twitter @Exg4m3r, que luego se determinó pertenecía a un adolescente que se había enterado de la aparición de un cadáver en la Ceamse porque a su padre lo llamó un amigo que trabajaba en esa planta para contárselo.