Tras el partido en Dubái, en el que debió abandonar entre lágrimas su partido de primera ronda ante el indio Somdev Devvarman por dolores recurrentes en la muñeca izquierda, el tandilense Juan Martín del Potro publicó una carta abierta de agradecimiento en Facebook.
El quinto jugador del ránking mundial expresa: «Primero que nada quería agradecerles de corazón las muestras de apoyo que llegan de todo el mundo. Sin dudas, es un momento triste para mí. No es lo que estaba en los planes cuando hice la dura pretemporada de diciembre y me ilusionaba con la chance de acercarme a los de arriba, pero tampoco es la primera piedra que encuentro en el camino durante mi carrera. Si hay algo que aprendí es a levantarme cuando me caigo», comienza el comunicado.
Y añade: «El problema en la muñeca ya me tiene intranquilo desde hace dos años, con altos y bajos, pero siempre con el apoyo de mi equipo de trabajo, mi familia, mis amigos y por supuesto, ustedes que siempre están ahí en las buenas y en las malas. Pese a este problema y a perderme Roland Garros por un virus, hice buenos torneos y pude igualar mi mejor ranking histórico, pero es frustrante no poder jugar como podría hacerlo si estuviera sano».
El tandilense también destaca a su médico, Richard Berger, porque «encontró la solución para la lesión en la otra muñeca en 2010». «Ahora seguiré con sus recomendaciones y haré los ejercicios de rehabilitación que me sugirió, y luego evaluaremos los pasos a seguir», señala «Delpo».
Y concluye: «De nuevo, ¡gracias por el apoyo! Les prometo seguir luchando como lo hice siempre».
El tandilense, que había llegado a las semifinales en sus dos visitas anteriores a Dubái, se fue lesionado al inicio del segundo set, tras haber perdido el primero -en 67 minutos- en el tie break.
En la conferencia de prensa posterior, Del Potro habló por primera vez sobre la chance de operarse , tal como ocurrió en 2010 con la muñeca derecha, tras haber sido campeón en el UsOpen 2009.
«No puedo hablar de cirugía todavía, pero estoy sintiendo dolores similares a los que sentía en la otra mano hace 4 años», advirtió.