El miércoles pasado Juan Carlos Guardati y Ángel Alberto Torti fueron imputados por cuarta vez. Los directivos fueron sometidos a un tribunal penal por primera vez en diciembre pasado cuando, junto con otros miembros del directorio y el síndico titular de las firmas que ambos conducen: una corredora y acopio de granos y una agencia de Bolsa. A esta audiencia imputativa le siguieron otras. Fueron señalados por el vaciamiento de cuentas de ahorristas, falsificación de balances, desmanejos y maniobras ilegalers en violación a sus deberes como administradores.
La última imputación tuvo lugar la semana pasada cuando Guardati y Torti fueron imputados por el fiscal Sebastián Narvaja por firmar al menos dos contratos donde se comprometían a pagar a dos acreedores, 7 mil dólares y 65 mil dólares respectivamente, en concepto de reparación.
Pero ese pago quedó supeditado a sus votos favorables en el concurso de acreedores que tramita en el fuero civil de la Justicia provincial. Esta vez ambos empresarios quedaron presos preventivamente, porque el juez Hernán Postma dictó la una cautelar de encierro por tres meses.
Pero el encierro no duró mucho para uno de ellos. Este viernes tuvo lugar una nueva audiencia donde se evaluó la medida cautelar dictada contra Juan Carlos Guardati.
Los máximos directivos de la firma Guardati Torti quedaron presos por 90 días tras nueva imputación
El informe de los médicos forenses que revisaron a los imputados -ambos superan los 75 años- refirió que Guardati no está en condiciones de salud para transitar un encierro en un penal, ya que se encuentra transitando una enfermedad, contó una fuente consultada.
La defensa pidió un arresto domiciliario al que no se opuso la Fiscalía, representada en esta oportunidad por Miguel Moreno, aunque solicitó la colocación de un dispositivo electrónico de control. A la medida tampoco se opuso la querella.
El juez interviniente, Hernán Postma, resolvió hacer lugar a la morigeración y enviar a Guardoti a cumplir la cautelar en su casa. Además ordenó controles sorpresivos de la comisaría con jurisdicción en el lugar y controles médicos por forenses por el plazo que dure la prisión domiciliaria.
Además quedarán a disposición de la Fiscalía las filmaciones de las cámaras de seguridad del edificio donde el imputado cumplirá la prisión domiciliaria, la que se extenderá por 90 días.
El directorio de Guardati y Torti recibió nueva imputación por otra millonaria estafa a empresario
