La cantante Demir Hannah se convirtió en la primera artista trans en participar, este año, en el icónico Festival de Chamamé de Corrientes, donde sintió que su voz «iba a ser escuchada», y de este modo sentó precedente para su colectivo en el ámbito de los festivales musicales populares que se realizan en el país.
La artista, cuyo nombre real es Claudia Falcón, nació en Buenos Aires hace 44 años y fue criada en Corrientes, la ciudad de origen de sus padres. Fue la primera persona trans en participar del tradicional festival chamamecero y en diálogo con la agencia de noticias Télam pidió mayor igualdad y una verdadera inclusión en los eventos populares.
«Desde 1995 fui Claudia dentro de mi familia y allegados; aunque siempre fui Claudia porque mis padres aceptaron mi identidad y no sufrí hostigamiento, siempre fomentaron la perseverancia en cada paso de mi vida», afirmó la artista.
Sobre su trayectoria, Demir agregó: “Desde mi transformación, en 1996, fui diseñadora, vestuarista y pasista de la agrupación musical Ritmo Show». Y aseguró que fue «la primera mujer trans en los carnavales de Corrientes».
Su transformación también la llevó a repensar su nombre artístico: «Demir es un nombre turco, masculino. Es algo fuerte, como el hierro, o como el junco que se dobla y no se rompe; tiene que ver con la perseverancia. Hannah, en la cultura hebrea, significa una mujer bella, brillante, llena de gracia, compasiva, creyente en Dios».
Y agregó el motivo por el que los eligió: “Fue porque son una dualidad entre masculino y femenino para definirme como mujer trans, donde hay ambas cosas, hay feminidad pero también hay fuerza, rudeza y tenacidad. Me pareció muy original para proyectarme poder usar Demir Hannah».
Hace más de veinte años que la artista incursiona en la música under e independiente, y en este 2022 tuvo la posibilidad de participar en el Festival del Chamamé de Corrientes en una actuación considerada histórica porque fue la primera cantante trans en integrar la programación de una edición festivalera, la 31ª.
«Cuando entré a ese escenario sentí goce y alivio. Estaba libre y pensé que por fin podía estar en un festival tan importante entregando mi voz», explicó la cantante.
Luego agregó que subió al escenario sin pensar demasiado. “Vi las luces y tantas personas sin distinguir los rostros, me di cuenta de que mi voz iba a ser escuchada por mucha gente sin saber quién era yo, y eso me hizo sentir plena», compartió.
Y al terminar su actuación, recordó: “Había logrado algo por lo que estuvo luchando. Ahora quiero que le suceda esto a otres artistes trans».
Hannah, que en el festival cantó temas de su álbum Ayer y hoy, ya tiene reasegurada su participación para la edición 32ª del Festival del Chamamé del año próximo.
La artista confesó que cuando sale al escenario siente que tiene que demostrar «con todo el cuerpo y toda la expresión» que está «disfrutando».
Sobre los festivales y la inclusión de artistas del colectivo travesti-trans, Demir consideró: “No han cambiado mucho. No incluyen. El folclore, que es tuyo, mío y nuestro, ahí es para unos pocos. Y los artistas que pertenecen a las disidencias, o no binaries, tienen problemas a la hora de participar».
Para esta artista, «los festivales deberían tener, también como misión, otorgar oportunidades a nuevos talentos».
Por eso emprendió de ahí su lucha, «para el acceso a los escenarios para artistes trans y no binaries”. “Hay que trabajar socio-culturalmente para la pluralidad, para que las identidades de género no sean una etiqueta que impidan el acceso al arte», sostuvo.
Luego consideró que con el colectivo trans, «debería trabajarse más en la naturalización, no negar las identidades de género autopercibidas y poner en vigencia la inclusión en relación con los tiempos actuales».
A Demir Hannah el chamamé le brindó la posibilidad de generar un cambio en el folclore del Litoral e invita a una nueva propuesta. «Corrientes me abrazó y me siento agradecida y feliz», concluyó la artista.