El 12 de abril de 2014 Nicolás Esteban Savani fue asesinado frente al camping del sindicato de Camioneros en Pérez, luego de que diez hombres armados emboscaran y dispararan contra los colectivos con trabajadores que llegaban para asistir a una asamblea del gremio.
Una década más tarde, no hay ninguna persona presa por el crimen, y desde la familia denuncian “abandono de la causa” e “imparcialidad en la investigación”, con el temor de que se termine consagrando la impunidad para los asesinos.
“Le quiero hablar a la sociedad. En una justicia donde solo prevalece la injusticia y la desidia para las víctimas, como este caso, después de 10 años imbatible contra esta injusticia vengo a contar esta realidad. Memoria por Nicolás Savani, trabajador asesinado por dirigentes corruptos”, dijo a la prensa Mauricio Savani, hermano de la víctima fatal.
El episodio ocurrió de forma sorpresiva, pero en una jornada con un fuerte clima de conflicto y tensión. Es que en la asamblea que se realizaba aquel día, al final se terminaría resolviendo las suspensiones del secretario general de Camioneros en Rosario, Marcelo Dainotto, y del tesorero, Miguel Ángel Caichiolo.
No obstante, tanto Savani como otros cientos de trabajadores fueron convocados para una asamblea extraordinaria en donde se trataría la memoria y balance.
En el momento en el que arribaron al lugar los cuatro colectivos, diez hombres armados que apoyaban la conducción de Rubén López abrieron fuego contra los micros.
Fue allí que Nicolás recibió la herida de bala fatal en el cuello, como así también resultó herido su hermano, Mauricio, junto a otros tres afiliados más del gremio rosarino de Camioneros.
“Una turba de gremialistas y barrabravas pagados por el sindicato de camionero de la provincia de Santa Fe lo esperaron a Nicolás al llegar y descender del colectivo para cometer el atroz crimen”, contó Mauricio sobre los hechos de aquel trágico día.
Además, explicó que “las cámaras que muestran detalladamente como se planeó y se organizó la emboscada para matar a Nicolás e herir de gravedad a varios trabajadores”, pero que en estos diez años no sabe si se peritaron porque desde Fiscalía nunca les respondieron.
Precisamente, hoy la familia apunta al fiscal a cargo de la investigación, Adrián Spelta: “Después de 10 años lo denuncié en la Justicia por abandono de la causa e imparcialidad en la investigación. Es una similitud enorme a la película de ‘Relatos Salvajes’ donde el fiscal hasta última instancia trata de otorgarle impunidad al culpable del hecho”.
“Durante 10 años el fiscal trató de hacer un arreglo con los imputados sin el consentimiento de la familia. Nos opusimos y fuimos a golpear más arriba para que respete la voluntad de la familia de obtener justicia cuando el fiscal puso en la carátula del caso homicidio en riñas”, agregó Mauricio.
Así también, denunció que Spelta “tampoco investigó, si fue así, por qué dejaron libres todos con fianza con los testimonios recabados y todas las pruebas: filmación de armas escondidas en el camping, remeras que vestían los atacantes a la hora de la emboscada, autos, camiones y la presencia de gremialistas en el hecho juntos a los atacantes”.
La principal preocupación de la familia del trabajador de la rama de Aguas y Gaseosas es que todo esto culmine con la impunidad de los responsables del crimen. De los seis imputados que hubo en 2021 por el crimen, todos afiliados al sindicato y señalados como responsables del asesinato, todos quedaron en libertad bajo fianza. Algunos de ellos, incluso, hoy son compañeros de Mauricio Savani, un recordatorio permanente del dolor y de la injusticia.