En la mañana de hoy, el fiscal general del Ministerio Público de la Acusación, Julio De Olazábal, junto al fiscal regional, Carlos Arietti, brindaron una conferencia de prensa en la ciudad de Rafaela, en la cual indicaron luego de conocerse el caso del crucificado, por el cual hay seis policías en disponibilidad, otros detenidos denunciaron que fueron obligados a comer materia fecal y beber orina y otra persona que fue baleada por un uniformado.
“Funcionarios policiales habrían privado ilegítimamente de la libertar a dos personas, uno de los cuales al encontrarse en los calabozos de la dependencia policial totalmente desnudo y esposado de espalda contra la reja y con sus manos fuera de la misma, fue obligado a comer su propia materia fecal y luego a beber la orina de dos personas que se hallaban en el lugar”, relató el fiscal Arietti. Y agregó: “Tras haber vomitado fue forzado a esparcírselo por todo su cuerpo”.
“Se hicieron numerosas tareas investigativas; entre ellas reconocimientos en rueda de personas, de los cuales se obtuvieron resultados positivos”, amplió el funcionario judicial. Esos reconocimientos se hicieron en la noche de ayer y la mañana de hoy, aclaró.
Pero además dijo que hubo un segundo hecho denunciado, que “implicó el uso de armas de fuego en perjuicio de una persona durante el mes de abril en el barrio Acapulco de Josefina (localidad ubicada al este de Frontera, también en el departamento Castellanos), quien como consecuencia de los disparos sufrió lesiones en uno de sus dedos de la mano izquierda y la quebradura del fémur de su pierna derecha”.
En ese caso, tanto la víctima como los testigos identificaron a personal policial de la seccional de Frontera como los autores del ilícito.
Tras esto, el fiscal general Julio De Olazábal sostuvo que “se está en presencia de tres hechos muy graves (sumó a los dos descriptos las supuestas torturas y vejámenes sufridas por el joven que terminó crucificado en la ciudad cordobesa de San Francisco), pero aislados uno de otros con un grupo de personas que lamentablemente pertenecen a la fuerza policial y que van a ser castigadas”.
En ese marco, aclararon que mañana por la mañana habría una audiencia imputativa por el primero de los hechos denunciados.
Arietta indicó además que se ha dispuesto la protección de testigos y víctimas de estos dos últimos hechos denunciados para “evitar que puedan ser atemorizados”.