Un estudio realizado por el Centro de Estudios para la Recuperación Argentina (Centro RA) de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires (UBA) indicó que el ajuste que el Gobierno realiza en la educación universitaria es igual a los beneficios impositivos que le otorga a los sectores más ricos.
El esfuerzo fiscal previsto para la actualización de recursos del sistema universitario es similar al que se realiza para el blanqueo y beneficio de los sectos más ricos del país, el cual se le otorga un 0,14%. Esto también suma a que queda por debajo del derviado del régimen de promoción industrial de Tierra del Fuego que es de un 0,22%.
La Oficina del Presupuesto del Congreso (OPC) analizó el impacto Fiscal del Proyecto de Ley que recompone el Financiamiento de Universidades Nacionales, el que obtuvo media sanción en la Cámara de Diputados.
El estudio indica que la actualización del conjunto de los gastos de funcionamiento tanto de universidad como de hospitales, la actualización de los fondos de ciencia y técnica y la recomposición salarial de docentes y no docentes equivale a un esfuerzo fiscal del 0,14% del PBI.
Destaca también que paralelamente “la reciente reforma fiscal, por ejemplo, incluía una fuerte reducción tanto presente como futura, de los impuestos al patrimonio que recaen en aquellos sectores con mayor riqueza en la sociedad. La modificación del mínimo no imponible y las alícuotas correspondientes a la fórmula del impuesto a los bienes personales, se traduciría en una caída en la percepción de ingresos pública de aproximadamente 0,14% puntos del PBI, en el mismo orden de magnitud que lo requerido para la actualización de los recursos del sistema universitario”.
En cuanto a los Bienes Personales, el Gobierno introdujo un incremento del mínimo no imponible a $100 millones y una reducción de las alícuotas para quienes tributan el impuesto. El informe agrega que se estima que la caída de recaudación por bienes personales sería de aproximadamente un 25% pasando de representar un 0,52% de PBI a un 0,38%.
La proyección realizada es con las modificaciones inherentes al primer año del ejercicio fiscal sobre el que recae el impuesto, por lo que la pérdida se incrementará en el tiempo. De esta manera una vez obtenida la estimación de la recaudación de bienes personales para el período fiscal 2022 se actualizó el mismo por la inflación promedio del 2023 con el fin de obtener el monto estimado de recaudación de impuesto a los bienes personales para el 2024 bajo el esquema de tributación impuesto a la reforma fiscal.