Maximiliano Almandoz practica taekwondo y representó al país en el exterior, pero hoy sobrevive con dos trabajos para llegar a fin de mes. Por eso, puso en venta un riñón vía Facebook para pagar la fiesta de 15 años a su hija.
Almadoz, quien vive en González Catán, habló en Radio 2 y afirmó: “Sabía que era una locura pero pensé que quizás a alguien le podía servir mi riñón, no sabía que no se podía, que había un protocolo y que iba a caer mal a muchos”.
Además es taekwondista y este año ganó dos medallas de oro representando a la Argentina en el exterior y obtuvo la de plata en el torneo nacional, pero admite que «no se puede vivir del taekwondo». Todos los premios parecen poca cosa si no puede satisfacer los deseos de Araceli, su hija de 14 años.
Maximiliano aseguró que su hija jamás le pidió nada pero que la presión era propia: quería darle a la chica una fiesta con amigos a lo “grande”.