Personal de Gendarmería Nacional y de la policía bonaerense ingresaron esta mañana a la planta de Pepsico en la localidad bonaerense de Florida a las 8.30, luego de media hora de iniciado el desalojo de la fábrica, ocupada por trabajadores despedidos.
Al menos cinco trabajadores de la planta de producción recientemente cerrada por Pepsico fueron detenidos esta mañana en medio de un violento desalojo ordenado por la Justicia en la planta recientemente cerrada por la empresa en la localidad de Florida, partido de Vicente López.
La Infantería de la Policía de la provincia de Buenos Aires llevaba adelante el operativo ordenado por la jueza de Garantías N°3 de San Isidro, Andrea Rodríguez Mentasty, para devolver las instalaciones a la firma de capitales estadounidenses. A pocos minutos de iniciar el operativo, la Infantería había despejado por medio de la represión con un grupo de choque y gas pimienta las veredas aledañas a la fábrica y luego ingresó a la planta para sacar de allí a los trabajadores.
Unos 50 trabajadores permanecían en los techos de la planta para resistir el desalojo pedido a la jueza de la causa por parte del fiscal Gastón Larramendi.
Los operarios decidieron ocupar las instalaciones de la empresa de capitales estadounidenses el 26 de junio pasado, seis días después de que la firma cerrara de forma imprevista y comunicara la situación pegando un cartel en el portón principal.
Tras casi una hora de operativo, la Infantería bonaerense no había podido bajar a los trabajadores que se encontraban resistiendo el desalojo desde los techos de la planta de producción de snacks salados.
Mientras la policía estaba desalojando las carpas ubicadas afuera de la planta de Pepsico, desde el edificio les tiran piedras pic.twitter.com/nF5Lct89GN
— TN – Todo Noticias (@todonoticias) 13 de julio de 2017
Fiscal justificó el desalojo de la planta de Pepsico
El fiscal Gastón Larramendi, quien pidió el desalojo de la planta de Pepsico, justificó hoy esa medida, al señalar que «hubo una intrusión ilegal de los trabajadores», aunque aclaró que la Justicia «no cuestiona el reclamo gremial» por los despidos.
Larramendi advirtió que la empresa «está ubicada en una zona residencial, de hecho hay dos colegios muy cerca. Yo respeto la legalidad, no se trata de perseguir por perseguir en sí mismo, pero hubo una intrusión ilegal por parte de los trabajadores. La orden de la jueza es el reintegro de la planta a los propietarios».
«Yo pedí el desalojo de la fábrica. Esto arrancó por una toma de la planta por parte del personal el 26 de junio. Según los denunciantes, el lugar tenía imposibilidad material, operativa y de riesgo ambiental para poder continuar, motivo por el cual las operaciones se trasladaron (desde Vicente López) a la planta de Mar del Plata», puntualizó Larramendi.
En declaraciones a radio El Mundo, el fiscal señaló además que, ante esta situación, «la empresa dijo que quería llegar a un acuerdo con los trabajadores, pero en ese momento no se pensaba en el desalojo».
«Por eso, nosotros no cuestionamos el reclamo gremial ni el laboral, ambos son lícitos, pero todos los derechos no son absolutos. El derecho a reclamar no puede avasallar el derecho de los demás. Se pidió el desalojo por el riesgo ambiental. Estamos ante una planta que elabora comestibles y no está comprobado que se cumplan los controles para que los productos salgan a la calle», enfatizó.
Repudio generalizado
El repudio de diferentes organizaciones sociales y sindicatos por la represión a trabajadores de Pepsico no tardó en llegar.
El Sindicato de Prensa de Rosario (SPR) expresó su rechazo a través de un comunicado, al accionar de las fuerzas federales, ordenadas por el gobierno de Mauricio Macri:
«El Sindicato de Prensa Rosario repudia la brutal represión que sufrieron las y los trabajadores de PepsiCo por defender sus puestos de trabajo y se solidariza con la lucha que siguen llevando adelante para preservar sus derechos. La violencia institucional en manos de la policía y de gendarmería no sólo arremetió contra los trabajadores de la empresa que tiene su planta en Florida, sino también contra las y los periodistas que acudieron al lugar para informar lo que estaba ocurriendo. Por eso, este hecho no sólo es otra muestra de la vulneración de los derechos laborales, de la impunidad de las empresas y de la complicidad del gobierno sino también del firme intento de que estos abusos de poder no trasciendan el cerco mediático, vapuleando el derecho a la información de toda la sociedad.
Por su parte, la CTA que lidera Hugo Yasky también hizo lo propio:
Desde el Frente de Izquierda, el referente local, Octavio Crivaro, arremetió contra el accionar de los efectivos contra los trabajadores que resistían en la planta:
.@C5N cubre en vivo desde #Pepsico y se escuchan cacerolas de vecinos q apoyan a las obreras. Nadie aplaude a los gendarmes, claro.
— Octavio Crivaro (@OctavioCrivaro) July 13, 2017
.@mauriciomacri manda cientos de gendarmes a pedido de la #JuezaMentastyPROPepsico y al servicio de los 600 despidos ilegales de #Pepsico. pic.twitter.com/2gfFQcPdJj
— Octavio Crivaro (@OctavioCrivaro) July 13, 2017
