El parte oficial indica que fue por la denuncia de vecinos. La Policía acudió a la dirección indcada en el llamado a la central de emergencias 911, que apuntaba a calle Juan B. Justo al 8200. Allí encontraron, con las puertas abiertas y a la vista de todos, las computadoras para apostar. Dos mujeres que estaban en el lugar y, en principio, manejaban las actividades, quedaron demoradas.
Los oficiales que participaron pertenecen a la subcomisaría 21a. Un hombre, que se identificó como vecino de la zona en la que se intersectan los barrios Fisherton y 7 de Septiembre, se había quejado de actividades de juego clandestino en Juan B. Justo al 8200.
Los policías entrevistaron a las dos mujeres que se presentaron como responsables del local –una vivienda particular adaptada–. La información del Ministerio de Seguridad las identificó como Liliana V., de 36 años, y Adriana Z., de 34. Admitieron que no tenían habilitación del lugar. Les comunicaron que estaban incursionando en el delito de juego clandestino.
La fiscal en turno Gabriela Bassagaisteguy ordenó que se secuestren los elementos informáticos y documentación del local, y que las dos mujeres queden demoradas.
