Desde la Asociación del Magisterio de Santa Fe (Amsafe) apuntaron al gobierno de la provincia por considerar que las últimas medidas adoptadas en el ámbito educativo son «resoluciones unilaterales». A su vez consideraron que la instancia para tratar condiciones de trabajo, carrera docente, temas pedagógicos y salariales es la mesa paritaria.
En un comunicado dejaron en claro que las resoluciones 216, 223 y 224 elaboradas por el Ministerio de Educación santafesino «desconocen lo que a diario sucede en las escuelas». En el mismo sentido expusieron que «no contemplan el trabajo cotidiano de docentes, directivos y supervisores».
Sobre la Resolución 216, manifestaron que es necesario recordar que el Estado tiene la obligación de garantizar las trayectorias de los alumnos y las alumnas. «Dicha función es indelegable, y no puede recaer en los supervisores y directores que ya realizan innumerables tareas», aseguraron.
Respecto a la situación de las evaluaciones mencionada en la resolución 224, coincidieron en que no puede desarrollarse tal y como se venían haciendo antes de la suspensión de clases presenciales. Pero agregaron: «Es momento excepcional y se hace necesaria una reestructuración que considere el recorrido de estudiantes y docentes en el presente contexto, que significa un gran esfuerzo para las instituciones y para toda la comunidad educativa».
En relación a la Resolución 223 sostuvieron que las instancias de evaluación para terminar carreras no deben poner en riesgo la salud de estudiantes y docentes, ni tampoco profundizar aún más las diferencias, debido a situaciones de conectividad, uso de datos o distancias. «Este no es un contexto en el que se pueda hablar de desarrollo normal del ciclo lectivo y debe ser entendido de esa manera», explicaron.
Por otra parte consideraron «inexplicable» el punto referido a examinaciones de alumnos que adeudan hasta cuatro (4) espacios curriculares pasada la evaluación de marzo de 2020. «Genera una situación de retroactividad e inequidad difícil de explicar cuando los turnos de exámenes de diciembre, febrero y marzo fueron cumplimentados normalmente. Actualmente los diferentes cursos de escuelas secundarias se encuentran desarrollando sus actividades y esta normativa significa un cambio arbitrario en las reglas de juego», expusieron desde Amsafe.
Si bien valoraron las medidas educativas adoptadas durante la pandemia exigieron»una propuesta seria, responsable y viable, en la que el Estado garantice el Derecho social a la Educación para que todos y todas». Con este argumento, defendieron la postura de que los instrumentos de evaluación construidos en este contexto «deben contar con la participación y la opinión de los trabajadores y las trabajadoras de la educación en el ámbito paritario».