En una audiencia que ya lleva dos días, Mariana Ortigala, una de las testigos fundamentales — junto a su hermano— en la causa que terminó con una prisión perpetua del narco Esteban Alvarado, enfrenta una nueva imputación tras su detención la semana pasada. El jueves fue indagada en la Justicia Federal por subalquilar propiedades a personas que se dedican al narcomenudeo. Ahora la acusación en el fuero provincial es por extorsión al dueño de una conocida agencia de loterías a quién le pidieron un millón y medio de dólares.
La fiscalía sindicó a Mariana Ortigala como parte de una organización que tiene varios integrantes detenidos, el más conocido Ariel «Guille» Cantero, actual jefe de la banda de Los Monos, a quien le achacan habilitar las maniobras desde la cárcel.
En total fueron 9 los imputados, entre ellos la Daiana Micaela «Diabla» Leguizamón, quien se tragó un chip de celular durante un allanamiento. Hubo pedido de prisión preventiva para 8 de ellos. La audiencia fue presidida por la jueza María Trinidad Chiabrera.
Según la imputación que llevó adelante la fiscalía a través de Pablo Socca y Miguel Moreno, entre el 2021 y 2022 Mariana Ortigala, Rodolfo Sebastián Felipe, Lorena Mireya Córdoba y otras personas que aún no fueron identificadas planearon intimidar y extorsionar al dueño de la agencia de loterías El Califa y su familia para que entregue una abultada suma de dinero en dólares.
En cuanto a Ariel «Guille» Cantero, para la fiscalía, desde su lugar de detención en Marcos Paz habilitó la extorsión al dueño de las agencias de lotería encomendando el hecho a personas de su confianza.
Prendieron fuego una agencia de loterías de la misma cadena que sufrió otro ataque incendiario
El primer contacto que tuvieron con el hombre fue en un gimnasio donde asistía. En marzo del 2021 entró un muchacho que se le acercó y le dijo “a mí me manda la mafia, tenés que poner un palo y medio verde para poder seguir trabajando tranquilo, sino no trabajas más”. Y le agregó: “Tenes que pagar, no vas a poder trabajar más, te vamos a denunciar en Fiscalía, si no pagas, la viuda de Rafaela tiene videos, pruebas, todas cosas contra vos. Te vamos a denunciar en Afip”. Antes de irse le dijo que lo iba a contactar una chica.
A ese gimnasio iban Ortigala y su pareja Rodolfo Felipe quienes tras el hecho dejaron de asistir. En febrero del 2022 Lorena C. fue a dos agencias de la víctima donde exigió hablar con el dueño. En el lugar dejó una nota con el número telefónico cuya titularidad a esa fecha era de Ortigala. El dueño se comunicó con el número y habló con Lorena Córdoba, quien sin identificarse le dijo que debía plata y se tenían que juntar a hablar porque lo iba a denunciar en Fiscalía y Afip, contó la fiscalía.
A partir de julio tres sucursales sufrieron incendios. Además le tirotearon desde una moto el frente de la casa. Vieron a un hombre rondar la vivienda varios días después. En otra ocasión dos personas en una moto llegaron a una de las agencias, le apuntaron a la empleada, gatillaron pero no salió la bala. Y a fin de ese mes le dejaron en una agencia de zona oeste una nota que decía “cumpa tenés que pagar 1.500.000 billete verde, no la hagas más larga, te vamos hacer cerrar todas las agencias, tenés 24 hs, somos rosario entero” y le dejaron dos números de teléfonos.
Para el fiscal el que organizó y mandó a ejecutar las intimidaciones desde su lugar de detención fue Brian Díaz, hermano de Maximiliano «Cachete» Díaz a quién además se le imputó otro hecho de extorsión a la dueña de un bar a la que le pidieron 2 mil dólares por teléfono y regresaron a buscar el botín. Ante la negativa de la mujer el joven que le pidió el sobre se retiró y poco después el lugar fue tiroteado.
Indagaron a Mariana Ortigala en una causa federal acusada de subalquilar viviendas a Los Monos
Tras estos hechos, personal policial intervino y comenzó a contactarse con el contacto telefónico desde el cual se comunicaban. Para la fiscalía el interlocutor era Brian Díaz y hay diversos diálogos donde afirma que fue el ejecutor de los incendios, que los iba a seguir tiroteando, que era amigo del Guille y hermano de Cachete “te va a llamar GUILLE. 100 mil verdes quiere el muchacho”.
Hay reiterados contactos telefónicos exigiendo el pago de las extorsiones. Para la fiscalía también participaron en estos hechos Vladimir Navarro, Kevin Moreno y Gonzalo Sarmiento, en el período 2021-2022.
La Diabla
En cuanto a la Diabla Leguizamón, mientras cumplía arresto domiciliario hacía de nexo con los autores de la extorsión, algunos no identificados hasta el momento mediante triangulación de comunicaciones permitiendo de esta manera la organización, le ejecución y la continuidad del ilícito que se estaba desarrollando, así como de otras actividades ilícitas e intentando de esta forma obstaculizar la identificación de los autores de este ilícito y de otros.
También le imputaron resistirse al allanamiento que se le realizó donde estaba cumpliendo domiciliaria, donde le descubrieron un celular que se utilizaba como “ancla” en el pañal de un bebé que estaba en el lugar. Y mientras se confeccionada el acta de los elementos secuestrados, la Diabla se paró de golpe, y con una mano que había zafado de las esposas se tragó la tarjeta SIM frente a los uniformados.
De testigo a imputada
En cuanto a Ortigala y a Rodolfo Felipe la fiscalía les imputó la tenencia de dos armas de fuego secuestradas en un allanamiento en la casa que compartían en el barrio Funes Town. Además la pareja fue imputada por lavado de activos. La fiscalía le achaca la compra de 14 propiedades en los últimos cuatro años que están a nombre de la mujer, su pareja y familiares cercanos incluido su hermano. Según la fiscalía esta circunstancia coincide con el momento en que la mujer ingresó al programa de protección de testigos.
El jueves pasado Ortigala fue indagada en la Justicia Federal por subalquilar propiedades a personas dedicadas al narcomenudeo.
