En abril pasado un empresario recibió extorsiones a su teléfono. El interlocutor, luego de darle detalles de su vida y de su empresa le dijo: “Mirá en este momento puedo hacerte esperar en tu casa si denuncias, igual te puedo encontrar en cualquier otra parte. Es así, yo te voy a dejar que vos hagas tu vida tranquilo mientras que vos nos des lo que queremos, si no vamos a usar otros medios, cerraremos tus negocios y tocaremos cualquier persona de tu familia”. La víctima, dueño de una empresa de catering de la ciudad denunció el hecho y se abrió una investigación. La fiscalía determinó que los aprietes venían desde la cárcel. Detuvieron a cinco personas parientes entre sí: dos de ellos estaban detenidos en distintas cárceles y son hermanos.
Tras la denuncia efectuada por los dueños de catering Marshall, el caso quedó en manos del fiscal Pablo Socca que trabajó junto a la Brigada de Extorsiones de la Agencia de Investigación Criminal. Los investigadores determinaron que las comunicaciones se hacían desde la cárcel de Coronda y la Unidad Penitenciaria 6 de Rosario. La pesquisa identificó a dos internos que tienen un parentesco, según publicó Punto Biz.
A la identificación de los sospechosos le siguieron algunos allanamientos que se llevaron adelante en Colombres al 2600 y 27 de Febrero al 7700. Allí fueron detenidos la madre de los internos, su pareja y la novia de uno de ellos. Ahora los cinco esperan por una imputación que se llevará adelante en los próximos días.