Los restos de Emiliano Sala, el futbolista argentino que murió el 21 de enero último en un accidente aéreo mientras se trasladaba de Nantes (Francia) a Cardiff (Gran Bretaña), fueron velados este sábado en el gimnasio del Club Atlético y Social San Martín de la comuna santafesina de Progreso, donde inició su carrera deportiva.
La despedida comenzó a las 7 y se extendió hasta las 15.30 en el club San Martín, en la avenida San Martín 117. Allí, el ex delantero del club Nantes comenzó su formación deportiva.
A cajón cerrado, el funeral comenzó con la familia junto al ataúd. Desde temprano empezaron a llegar familiares, amigos y algunos vecinos de Progreso, un pueblo de 3.000 habitantes.
«Nunca caminarás solo»
«Nunca caminarás solo», ese fue mensaje dejado en una bandera colgada en el club. Dentro de las instalaciones, numerosas coronas y dos fotos en gigantografía del delantero rodearon al féretro.
La comuna de Progreso se vio alterada por la presencia de muchos medios internacionales y un fuerte operativo de seguridad de la Policía de Santa Fe y de una empresa privada.
Raúl, árbitro de la liga de fútbol de Esperanza, que lo tuvo a Emiliano como jugador cuando era adolescente, llegó al funeral desde San Jorge, a más de 200 kilómetros de Progreso. «La verdad que tengo mucha tristeza, era un gran pibe», relató.
Nacho, primo del padre de Emiliano y también oriundo de Cululú, el pueblo donde nació el jugador, contó tras salir del funeral que «estoy muy triste, la familia está muy tocada, pero bueno son cosas de la vida». «No llegamos a comprender cómo pasó esto, estamos doloridos», agregó.
El cajón con los restos del futbolista llegó en la mañana del viernes desde Gran Bretaña al aeropuerto de Ezeiza. Desde ahí lo trasladaron en una camioneta hasta la ciudad de Santa Fe y, ya en la madrugada de este sábado, hacia Progreso.
La familia del jugador pidió cremar sus restos después del velatorio, lo que fue autorizado por las autoridades judiciales que intervienen en el caso.
Jugadores del Nantes y el Cardiff presentes
Entre los presentes en el velorio estuvieron el entrenador del Cardiff City de Gales, Neil Warnock, y el defensor del Nantes de Francia e íntimo amigo de Sala Nicolas Pallois, el último club en el que jugó el argentino.
La avioneta Piper PA-46 Malibu que trasladaba a Sala desde Nantes a Cardiff desapareció el lunes 21 de enero cuando cruzaba el Canal de la Mancha, luego de que el club galés comprara la ficha del jugador al Nantes a cambio de 17 millones de euros. El cadáver de Sala fue recuperado la semana última del fondo del Canal de la Mancha, en tanto aún no se encontró el del piloto.
«A Emiliano lo mataron»
Un primo de Emiliano Sala, Matías, señaló que al futbolista «lo mataron» alegando que «hubo muchas irregularidades» y que «lo obligaron» a subirse al avión que cayó al Canal de la Mancha.
«A Emiliano lo mataron. Hubo muchas irregularidades, se hizo todo mal y lo obligaron a subir a ese avión. Él empezaba a ser una persona importante y lo dejaron solo porque fue solo sin un representante», aseveró.
En diálogo con A24, Matías dijo luego: «Creo que la justicia va a investigar porque hubo muchas irregularidades desde el principio. Lo tenían que haber cuidado un poco más y hacerlo viajar en un avión de otras condiciones».
Además manifestó que ninguno de los representantes del jugador asistieron al homenaje que le realizaban en la ciudad santafecina de Progreso.