Las cinco máximas autoridades de la Unidad Penitenciaria 23 de Florencio Varela fueron desplazadas de su cargo tras los incidentes registrados el miércoles pasado por los reclamos de mayores medidas sanitarias y celeridad en las excarcelaciones de la población en riesgo para contraer el covid -19, que finalizaron con un preso asesinado que presentaba lesiones de postas de plomo y de goma, y otros 40 heridos de distinta consideración, se informó oficialmente.
“Vamos a avanzar con la investigación hasta las últimas consecuencias. La utilización de proyectiles de plomo no está permitida dentro de las cárceles. Se utiliza en la seguridad perimetral, solo en casos extremos y para repeler agresiones externas”, afirmó el titular del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB), Xavier Areses, en referencia al asesinato del interno, identificado como Federico Rey, de 30 años.
Ante esta situación, Areses dispuso el inmediato relevo del director de la cárcel, los tres subdirectores y el Jefe de la Sección Vigilancia y Tratamiento de la Unidad 23 de Varela, donde se desarrollaron los incidentes este miércoles.
Las autoridades penitenciarias agregaron que, mientras tanto, continúa adelante el sumario administrativo que se inició a todos aquellos que participaron del operativo ante los incidentes originados por los presos, con el objetivo de determinar «las responsabilidades de los agentes que participaron del incidente fatal».
En el comunicado, el SPB señaló que puso a disposición de la titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) descentralizada 9 de Florencio Varela, Roxana Giménez, todas las escopetas tipo Ithaca utilizadas en el procedimiento y las vainas servidas secuestradas en el establecimiento carcelario.
Todas las armas aportadas a la Justicia serán peritadas para intentar establecer si de alguna de ellas partieron los disparos que le provocaron la muerte al interno.
En tanto, Asuntos Internos del Ministerio de Justicia elevó a la fiscal Giménez el sumario administrativo elaborado como consecuencia de los hechos, para que sea analizado.
«Los instructores judiciales ya tienen en su poder las escopetas utilizadas por los integrantes del Grupo de Intervención especial (GIE) y los de la Guardia de Seguridad Exterior», indicó el comunicado.
Según el SPB, la autopsia realizada al cuerpo de la víctima determinó que presentaba «ocho impactos compatibles a postas de goma y al menos uno de plomo y que no presentaba heridas punzantes» y señaló que «tras el lamentable episodio, se contactó a los familiares del interno fallecido para brindarles asistencia».
La investigación del caso está a cargo de la fiscal Giménez y del Ayudante Fiscal Cristian Granados, bajo la supervisión del juez Marcelo Villagra, titular del Juzgado de Garantías 8 de Quilmes.
Las revueltas
Los reclamos comenzaron el miércoles pasado por la mañana y escalaron hasta llegar a incidentes en los pabellones 2, 6 y 7, del sector de máxima seguridad de la unidad penitenciaria en medio de la crisis sanitaria por la pandemia de coronavirus, en un contexto en el que los reclusos pedían celeridad en la excarcelaciones por temor a ser contagiados.
Ante esa situación, los guardiacárceles ingresaron para «restablecer el orden», de los que resultaron heridos con lesiones leves 40 internos y 15 agentes del SPB, según se informó oficialmente.
La situación volvió a la normalidad luego de la conformación de una mesa de mediación entre las autoridades judiciales, penitenciarias y de la Comisión Provincial por la Memoria con referentes de los distintos pabellones.