Misterio develado, el Rugby Championship se jugará en Australia. Así lo anunció Sanzaar, con bombos y platillos. Después de muchas idas y venidas, de reuniones virtuales, el Torneo de las Cuatro Naciones definió su sede única, formato que obedece a la pandemia mundial de Covid-19, y la mejor solución para poder disputar el certamen que reúne a los mejores seleccionados del Hemisferio Sur es hacerlo en Australia. La fecha ya había sido anunciada por World Rugby, será desde el 7 de noviembre al 12 de diciembre.
El torneo será de seis semanas, con un total de 12 partidos “en casa y afuera” e involucrará a Argentina, Australia, Nueva Zelanda y Sudáfrica. “Estamos encantados de que Sanzaar pueda, por fin, confirmar a los participantes y el país anfitrión del Rugby Championship y poner fin a las continuas especulaciones sobre el formato y la ubicación de los torneos. Tradicionalmente, la Rugby Championship se juega como una serie internacional transfronteriza de partidos en casa y fuera de casa entre Argentina, Australia, Nueva Zelanda y Sudáfrica, pero debido a la pandemia, esto obviamente no es posible este año”, declaró Andy Marinos, CEO de Sanzaar.
Marinos declaró que la participación de Sudáfrica aún no se ha confirmado, ya que depende de varios factores fuera del control de Sanzaar: “El progreso y el impacto de la pandemia ha variado de un país a otro y la competencia deportiva internacional está actualmente suspendida en Sudáfrica. La participación de los Springboks dependerá de que se relaje esa suspensión, así como de superar una serie de otros desafíos logísticos, incluida la apertura de las fronteras aéreas internacionales. Se espera que Sudáfrica regrese al juego competitivo el próximo mes (octubre), lo que deja un tiempo relativamente corto para prepararse”.
Y también el CEO de Sanzaar expresó: “El Rugby Championship es uno de los torneos más importantes y prestigiosos del rugby internacional y es fantástico poder ofrecer, por fin, algo de claridad a los aficionados al rugby y a los jugadores. No hubiera sido posible si no fuera por las enormes contribuciones de nuestras Uniones, nuestros socios de transmisión, así como los gobiernos de Australia (estatal y federal) y de Nueva Zelanda por su asistencia y contribución a través de sus respectivas Uniones Nacionales de Rugby durante este proceso. Sanzaar está trabajando actualmente en el perfeccionamiento de la planificación detallada con Rugby Australia y esperamos anunciar las sedes de los partidos, las fechas de los partidos y los horarios de inicio en un futuro muy próximo”.
Ahora se viene la discusión con los equipos europeos sobre la liberación de los jugadores por la Regla 9, que establece que los clubes deben liberar con una semana de anticipación a los jugadores, pero para 2020, World Rugby dispuso que dicha legislación sea de más días, para que los rugbiers puedan llegar y hacer la cuarentena en destino y poder jugar. Será una dura batalla, porque al día de hoy los clubes franceses no quieren saber nada con la extensión de la regla, mientras que los ingleses aún no han hecho pública su opinión.
En tanto, desde Australia, afirman que ya tuvieron comunicación con la UAR sobre la posibilidad de organizar partidos amistosos para Los Pumas, ya que desde marzo los jugadores argentinos no tienen actividad. Por lo pronto, serían dos encuentros, ante Australia A y Waratahs, pero todavía no están confirmados. Lo que sí es una realidad es que en tierras wallabies le buscan rivales al seleccionado argentino en la previa del Championship.
“Argentina lo pidió y estaríamos más que felices de ayudar a organizarlos, así que eso se está discutiendo ahora. Lamentablemente, Argentina no ha podido jugar ningún partido aún, por lo que esos encuentros serán realmente importantes para ellos. Posiblemente estemos viendo un par de partidos contra un equipo A australiano y luego contra uno de los conjuntos que participa en Súper Rugby. En este momento eso es lo que estamos buscando arreglar para Argentina y también nos permitiría mostrar algunos de nuestros talentos emergentes”, dijo Rob Clarke, CEO de Rugby Australia.