Un sector de las pequeñas y medianas empresas reclamaron al Banco Central que instrumente un “dólar pyme” para “poner en pie de igualdad” a las fábricas manufactureras exportadoras con los beneficios anunciados para la liquidación de divisas del campo. “La falta de competitividad mundial que tienen las empresas nacionales está dejando al borde del colapso a la industria nacional”, advirtió el presidente de Industriales Pymes Argentinos (IPA) Daniel Rosato.
La entidad empresaria busca que el Banco Central apruebe un instrumento similar al que anunció el martes para que los productores agropecuarios vendan su cosecha de soja, en la misma línea de los beneficios que reciben industrias, energéticas y del conocimiento que incrementan sus exportaciones.
“Reclamamos que la última medida que tomó el Banco Central, buscando que el agro liquide sus exportaciones a un dólar diferenciado y muy conveniente, se aplique también para las pymes industriales, porque es injusto que las fábricas no puedan acceder a ese dólar en un momento en que nuestro sector está haciendo un gran esfuerzo para sostener las exportaciones, en algunos casos hasta con pérdidas”, sostuvo Rosato.
Y destacó que un “dólar pyme será muy beneficioso para el país, ya que la industria también es generadora de divisas”.
El IPA cursó dos planteos al gobierno para superar la escasez de dólares, que generó restricciones en la asignación de divisas para la importación de insumos de las fábricas: crear una Mesa de Diálogo Pyme, en donde el sector esté representado en el debate de las necesidades urgentes, y el desdoblamiento cambiario para las exportaciones industriales, de modo de poder cumplir con los contratos en el exterior.
En ese sentido, Rosato destacó la necesidad de implementar una “estrategia de asignación de las divisas, en donde la prioridad sean las empresas que sustituyen importaciones de productos finales, abastezcan al mercado interno y generen empleo genuino”.
En esa línea el titular de IPA también propuso “concentrar las decisiones en el área productiva del gobierno para que, si bien haya decisiones compartidas entre todo el gabinete económico, sea un Ministerio el que tome las medidas a partir del diálogo con las pymes”.
En el caso de la soja, el directorio del Banco Central aprobó un instrumento vigente hasta el 31 de agosto próximo que permitirá quelos productores realicen un depósito a la vista en las entidades financieras con retribución diaria variable en función de la evolución del tipo de cambio A3500, conocido como Dólar Link, por hasta el 70% del valor de la venta de granos.
Además, por el 30% restante se permitirá la compra de divisas (formación de activos externos) al valor del dólar oficial más el impuesto Pais y las retenciones a cuenta que percibe la Afip. La disposición equilibró a los productores agropecuarios con otros sectores productivos, con libre disponibilidad de divisas por el incremento de las exportaciones que se realicen respecto del año anterior (industria manufacturera), el Régimen de Fomento de Inversión para la Exportación y el Régimen para la Industria del Conocimiento, que permite aplicar parte del incremento de las exportaciones al pago de la masa salarial.