“Este fallo nos sigue permitiendo garantizar el derecho que tiene una mujer víctima de un abuso a acceder a un aborto no punible, sin ser judicializada y sin el temor a la persecución”, señaló el subsecretario de Salud Pública municipal, Leonardo Caruana, en relación con el reciente fallo de la Corte Suprema de la Nación. La resolución sentenció, por unanimidad, que no se podrá sancionar a ninguna mujer violada que interrumpa su embarazo; precisando así el alcance del aborto no punible. A su vez, indicó que las mujeres no necesitarán un permiso judicial para efectuárselo y exhortó a implementar protocolos hospitalarios. En este marco, Caruana dijo que tanto la provincia como Rosario son “pioneros en el acceso a la consulta y en los protocolos en relación al aborto no punible”.
Según explicó Caruana, el fallo de la Corte Suprema está “en sintonía con las políticas que se vienen dando en la provincia de Santa Fe, a través de diferentes reglamentaciones y ordenanzas”. En Rosario, particularmente y tal como señaló el subsecretario, el trabajo para garantizar el acceso a la información y a la atención médica de chicas que tienen que acceder a un aborto no punible se intensificó mucho más a partir de la sanción de la ordenanza 8186, que fija el Protocolo de Atención Integral para la Mujer en Casos de Abortos no Punibles.
“A partir de ese momento, se reglamentó el acceso a la información y la realización de ésta y otras prácticas que tienen que ver con la procreación responsable, la realización del aborto no punible, el derecho a la anticoncepción de emergencia y a todos los métodos anticonceptivos”, dijo el funcionario. Y agregó: “En ese sentido, la definición no restrictiva de la Corte Suprema en la no judicialización de la realización del aborto no punible refuerza lo que venimos trabajando, que es poder llevar adelante la práctica en los diferentes efectores de salud sin la participación del Poder Judicial”.
Analizando el nuevo panorama que se abre a partir de ahora, que implica la apertura de un nuevo paradigma de discusión del tema, Leonardo Caruana resaltó que, a pesar de que son pocas las situaciones en las que se llega a un aborto no punible, desde que se reforzó el trabajo en esta área los casos de muerte por aborto han disminuido, y, desde su perspectiva, eso tiene un claro correlato con “las garantías que se ofrecen desde el Estado”. Además, consideró que, ante este tipo de situaciones, la sociedad se encuentra más “flexible y sensible” al respecto.
“Hay una concepción de derecho diferente en la ciudad, después de años de garantizar el acceso a la anticoncepción y a la información. Esto no hace más que reforzar lo que se viene trabajando en el municipio y la provincia”, dijo. Y a modo de ejemplo, señaló que actualmente los y las jóvenes no tienen ni miedo ni vergüenza de acercarse a los efectores a pedir preservativos, a preguntar por la realización del papanicolau, a analizar los pro y contra de cada anticonceptivo.
Sin embargo, y a pesar de tantas buenas noticias, el aborto continúa siendo una realidad no sólo para las víctimas de abusos o las que sufren algún tipo de enfermedad; sino para aquéllas que deciden abortar y mueren dentro de la ilegalidad. “La problemática es mucho más compleja que definir si se está a favor o no del aborto legal. Uno trabaja en función de tener los servicios de salud accesibles a la población; de la posibilidad de la anticoncepción gratuita y la educación sexual en todos los lugares en que la población se relacione con el Estado. Estar en esa línea es una estrategia que da cuenta de la complejidad”.
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